Han pasado casi dos años desde que probé el AEGAON Tabula Rasa 44 Quartz, y hoy repetimos con la marca, esta vez con el modelo que tenía pendiente en su momento, el Peacemaker 53 Skeleton M, una pieza que la compañía estona ha actualizado recientemente, haciéndola aún más interesante. Así que tras el Neucarl The Sept Mai damos paso a este original reloj, como es habitual, con una prueba a fondo.
Ficha técnica
Género | Unisex |
Caja | Acero inoxidable 316L. 53mm de diámetro sin contar la corona. 10,5mm de alto |
Corona | Roscada de acero |
Esfera | Esqueletizada de acero |
Bisel | Fijo de acero |
Cristal | Zafiro |
Lumen | Sí |
Trasera | Roscada de exhibición |
Correa | Acero inoxidable de 26mm de ancho |
Funciones | Hora, minutos, segundos |
Resistencia al agua | 100M (10 ATM) |
Peso | 248g (133g sin correa) |
Movimiento | Seagull TY3600.2. 21.600 vph. 17 rubís. |
Complicaciones | Cuerda manual. Segundero pequeño |
Prestaciones | 52h de reserva de marcha. N/D segundos/día |
Origen | Diseñado y ensamblado en Estonia |
Garantía | 2 años |
PVP | 690€ (rebajado a 552€) |
Distribuidor | Aegaon Watch Company |
Presentación
Recibimos el reloj en un packaging que nos parece idéntico al del Tabula Rasa 44, si bien cuando lo ponemos lado a lado, nos daremos cuenta que hay varias diferencias, la primera es que el número de serie impreso en negro sobre el cartón blanco deslizante ahora indica «PM53-HHHMH», el segundo es más revelador, porque la caja es algo más grande. Como ya expliqué con el Tabula Rasa, ese número de serie impreso tiene por objetivo optimizar procesos y reducir errores, el centro logístico con el que trabajan lo usa para clasificar la mercancía en el almacén, aunque no estaría de más que incorporase también el logotipo de AEGAON.
En su interior tenemos una caja recubierta de símil piel negra con las leyendas y los pespuntes de las costuras en blanco. Es algo más grande que en el Tabula Rasa, menos redondeada y ligeramente acolchada lo que le da una mejor apariencia.
Al abrir la cubierta se nos muestra un interior muy similar al del Tabula Rasa 44, dejando destacar así el imponente reloj que como iremos viendo más adelante, es el AEGAON Peacemaker.
La dotación es minimalista, un pequeño libro que hace las veces de manual de instrucciones y tarjeta de garantía, y que en contraste con el reloj parece diminuto. Es algo intencionado ya que la marca se dio cuenta que los usuarios sólo acudían a los manuales cuando ya era tarde. Por eso optaron por concentrarlo a lo más indispensable, y así facilitar la lectura. De cara a futuro están considerando explicar las instrucciones en formato vídeo.
Introducción
El AEGAON Peacemaker 65 con sus 65mm de diámetro y sus 300g de peso era mi favorito, el reloj más masivo y espectacular del que tengo constancia. Sin embargo, y dado que aún no se ofrece con brazalete de acero inoxidable opté por la versión en tamaño «medio», el AEGAON Peacemaker 53 skeleton M, el hermano pequeño del 65 que con «sólo» 53mm de diámetro y 133g sin contar el armis es también espectacular. Según me explicaron desde la marca, sólo ha habido un pedido del Peacemaker 65 XL con brazalete de acero, lo que prueba que hay que tener músculo y muñeca para lucirlo como se merece.
Si bien el nuevo lanzamiento de Aegaon Watch Company es el Tribute 45, la historia de AEGAON comenzó precisamente con el Peacemaker 65 en 2012. En 2017 llegaría su versión reducida, el Peacemaker 53. En 2018 se actualizaría con mayor calidad y una resistencia al agua aumentada de 30M hasta 50M.
Ambos tendrían que esperar hasta principios de 2021 para recibir la segunda actualización: una corona roscada y el aumento del hermetismo de 5 ATM hasta las 10 ATM.
La gama Peacemaker 2021 queda estructurada de esta manera:
– «PEACEMAKER 53» skeleton M: Referencia PM53-HHHNM. Con correa de piel vintage negra. 690€ rebajado a 552€.
– «PEACEMAKER 53» skeleton M: Referencia PM53-HHHNP. Con correa de piel vintage marrón. 690€ rebajado a 552€.
– «PEACEMAKER 53» skeleton M: Referencia PM53-HHHMH. Con brazalete de acero. 690€ rebajado a 552€.
– «PEACEMAKER 65» skeleton: Referencia PM65-HHHNM. Con correa de piel vintage negra. 790€ rebajado a 632€.
– «PEACEMAKER 65» skeleton: Referencia PM65-HHHNP. Con correa de piel vintage marrón. 790€ rebajado a 632€.
En mi caso debí de recibir una de las últimas unidades, puesto que la versión con brazalete (PM53-HHHMH), actualmente se encuentra agotada y que se espera que vuelvan a estar disponibles en las próximas semanas. Y es que con gran diferencia, el Peacemaker 53 es el tamaño más exitoso de la gama.
Puesto que su concepto es el de que hay que atreverse, le dan una vuelta de hoja y al igual que el Casio G-Shock GBD-H1000, engloban el Peacemaker Skeleton 53 como un reloj unisex (no así el 65), un recurso que utilizan incluso en su comunicación interna y que explica por qué se ofrece tanto en el catálogo de relojes para mujer como en el de hombre.
Incluso si pasas por Estonia, podrás acercarte a su tienda física en Aia 5b, Tallinn.
Diseño y construcción
La caja tiene 53mm de diámetro sin contar la corona. Sólo por eso ya sería espectacular, pero es que además para darle más vistosidad todo el acero inoxidable 316L con el que está construida va acabada en pulido a brillo. Pese a su gran tamaño, es un reloj muy plano con sólo 10,5mm de grosor, lo que debería hacerlo práctico y cómodo en la muñeca. La caja ofrece una resistencia al agua de 100M.
La corona es de acero inoxidable pulida. Funciona a rosca y se encuentra situada en el lado opuesto al habitual, las 9. Está sobredimensionada, dándole un buen aspecto al conjunto, y que será además muy fácil de manipular.
Lleva un cristal de zafiro plano con tratamiento antirreflejante que va anclado a la caja por un bisel externo fijo también de acero espejado.
La esfera llama aún más la atención si cabe. Es de tipo esqueletizada, pero esqueletizada completamente. Salvo el anillo exterior metálico que contiene los índices horarios todo el resto nos permite ver el corazón mecánico del reloj en movimiento. Los marcadores horarios tienen una forma tridimensional, pero opuesta a lo habitual, no están sobreelevados sino que es un bajorrelieve en el contorno. El resultado me gusta, aunque se echa en falta los índices minuteros. La marca va impresa en color negro en un saliente entre las 5 y las 7. El motivo de esa extraña ubicación es muy sencillo, aunque hay que buscarlo detenidamente. La posición de las 12 la ocupa la manecilla del segundero pequeño.
Las agujas son de tipo bastón recto, en este caso han optado por una buena decisión de diseño, usando contornos de color blanco en vez de los comunes plateados para darle más contraste. De esa manera su legibilidad es buena en las agujas principales, aunque mucho menos en la segundera.
Como tienen un buen grosor, lo han aprovechado para aplicarle lume, de nuevo una solución acertada que no solemos ver en relojes esqueleto. Es algo que como entusiasta de lume me gusta mucho, pero que además creo que aporta funcionalidad. No indican de qué compuesto se trata, todo parece indicar que es Swiss Super-LumiNova C1, puesto que a la luz del día es blanca y verde en la oscuridad. Su rendimiento es muy bueno, suficiente para intuir la hora en la esfera. Habría estado bien que los marcadores horarios también tuvieran luminiscencia.
La trasera sigue un esquema similar al de la esfera. Es roscada de acero, en este caso y como única excepción con la superficie cepillada y ofrece una enorme ventana de exhibición cubierta por cristal de zafiro. El generoso calibre de su interior se ve de maravilla a través de él. Tal vez me falte que no haya ningún grabado con láser mencionando la marca o el modelo, e incluso su resistencia al agua, algo que los usuarios menos expertos tienden a olvidar con el paso del tiempo. La razón es que muchos de los clientes que adquieren un Peacemaker quieren personalizar la trasera con un grabado, algo que abarca también al mundo empresarial con inscripciones conmemorativas. En realidad después de que probara el TR en 2019, a petición de los usuarios eliminaron la leyenda de «TABULA RASA» en la trasera para así dejar más espacio disponible a personalizaciones.
El tipo de correa que usa en esta versión es un brazalete de acero inoxidable. Tiene nada menos que 26mm de ancho en las asas. Va anclado por unos robustos tornillos en vez de usar pasadores, cuenta con 4 microajustes y ofrece bloqueo de seguridad aunque no apertura por pulsadores. El acabado es pulido a brillo, conjuntando así con el resto del reloj, pero haciéndolo más proclive ante arañazos debidos al uso, sobre todo en el cierre que va sin firmar. Se puede comprar por separado a 59€, un precio muy razonable y según se indica, pesa 115g, lo cual no es demasiado teniendo en cuenta su ancho, su grosor y su longitud (185 mm).
Sobre el peso declarado de 133 gramos que es sólo el reloj, si le sumamos esos 115g nos da una cifra total de 248g, algo que cuadra con mis mediciones puesto que con el brazalete de acero y todos sus eslabones me ha dado 249 gramos.
Movimiento
Si hemos visto que el Peacemaker es un reloj poco convencional por fuera, no lo es menos por dentro, puesto que la marca ha optado por moverlo usando un calibre de remonte manual, el Sea-Gull TY3600/ST3600, un clon del conocido ETA/Unitas 6497-2 que fabrica el Tianjin Seagull Watch Group, y que ya vimos en el Parnis Classic. Sin embargo para este modelo han optado por el ST36 en su versión TY3600.2, también denominada 36002 y que es una variante adaptada a relojes esqueletizados con una decoración más elaborada, de hecho el 3600.2 comparado con el 3600 estándar cuesta casi el doble.
Por lo demás mantiene sus generosas dimensiones, muy a la par con el concepto del reloj, y que vienen heredadas de los relojes de bolsillo (37,2mm de diámetro) y una altura de 4,5mm. Lleva segundero pequeño a las 6, y la corona a las 3. Como se puede percibir, en AEGAON lo han rotado, por lo que ahora la corona está a las 9 y el segundero pequeño a las 12.
Tiene 17 rubís, y a diferencia del Unitas 6497-1 que late a 18.800 vph, lo hace a 21.600 como el más caro 6497-2. El calibre ofrece un remonte manual muy agradable y no cuenta con parada de segundero o hacking. Contemplarlo es algo muy bello, ya que el trabajo de decoración parece de una pieza bastante más cara.
Dependiendo de la fuente a la que acudamos se habla de una reserva de marcha de entre 46 y 56 horas. La marca ha adoptado un valor intermedio, y la cifra en 52 horas, que es más de lo que ofrecen la mayoría de maquinarias de carga automática. En cuanto a precisión no se proporcionan cifras oficiales, ni por parte de AEGAON ni por parte de Tianjin, así que haremos referencias a las de ETA con una desviación media de +/-15 segundos al día en el grado standard (6497-1), de +/-2 segundos al día en el elaboré (6497-1), de +/-5 segundos/día en el top (6497-2), y COSC con un máximo de -4/+6 segundos/día en la versión chronometre (6497-2). Como siempre, la mejor forma de verificarlo es en el cronocomparador, en donde ha obtenido un valor mejor del esperado, mostrando un retraso de -10 spd, pero de manera muy estable. Muy buenas cifras para esa maquinaria, y buenas en general dentro de la relojería mecánica.
Sensaciones
No puedo decir que sea un apasionado de los relojes esqueletizados ni openheart, la única excepción es este PeaceMaker 2021 y puede que también con el WQT Eclipse. En el caso que nos ocupa la razón es que su enorme esfera casi parece un escaparate. Un ventanal desde el cual poder ver, no solamente la hora, sino el trabajo de la maquinaria mecánica del reloj, un movimiento que además tiene una decoración bonita y muy elaborada. Da gusto verlo como suele decirse.
Con los 47,5mm del Steeldive 1975 «Tuna» u los 47mm del Invicta Grand Diver 3045 el PeaceMaker 53 es un reloj grande, pero se lleva con comodidad y no resulta aparatoso. No es particularmente pesado, no al menos mucho más que un reloj de tipo buceo o diver. Por ese motivo me gusta que se llame «Pacificador», y es que incluso lo de Peacemaker le queda bien.
Verlo en la muñeca es una sensación que impresiona, quizás por los gigantescos 26mm de ancho de correa. No puedo ni imaginarme lo que se debe sentir llevando los 3cm del Peacemaker 65. Una pieza que te da un toque poderoso, y que evidentemente no pasa desapercibida. La corona situada a las 9 hace que no moleste cuando doblamos la muñeca. Que sea roscada (screw-down) es algo necesario para su asegurar su hermetismo, pero me parece una incomodidad en un reloj de cuerda manual, obligándonos a tener que enroscar y desenroscar cada uno o dos días para remontarlo manualmente, justamente una de las cosas que no me gustaron Alpha Moon Watch. Según me han explicado desde la marca, es algo hecho a propósito, no es sólo porque evita que la corona se extraiga accidentalmente facilitando la entrada de agua, sino además para proporcionarle mayor robustez a la corona.
Su único defecto es en mi opinión la escasa legibilidad del segundero, pero lo considero algo leve, a fin de cuentas no es un guardatiempo que busque la medición exacta del tiempo ya que ésta siempre será aproximada debido a la ausencia de marcadores de minutos.
Conclusiones
Los Peacemaker no son relojes económicos, el modelo 53 con un PVP de 690€ que ahora se encuentra rebajado a 552€ entra en una liga de precios con mucha competencia. Ese es el precio a pagar por sus materiales y por su diseño y ensamblaje en Estonio, que hay que recordar forma parte de la U.E. y por tanto no requiere pagos de impuestos ni aranceles. Es algo que ya veíamos con el Tabula Rasa y sus 360€. Ahora bien, ningún otro reloj que yo conozca ofrece las sensaciones que da este AEGAON. Y es que su tamaño impresiona. No se trata de hacer un reloj grande, sino de hacerlo para que resulte atractivo y equilibrado como han hecho en este reloj. Precio por precio, el Peacemaker sigue siendo más accesible que un Casio G-Shock «Rangeman» GPR-B1000.
Viendo lo rápido que es acostumbrarse a un reloj tan espectacular, no me cabe ninguna duda de que en caso de existir el Peacemaker 65 con brazalete de acero esa habría sido mi opción.
▲ Más | ▼ Menos |
Espectacularidad en la muñeca Mismo precio con brazalete que con correa |
Poca legibilidad del segundero Corona roscada incómoda para remontar el reloj |
Buenos días D. Javier y resto de amigos de la bitácora.
Enhorabuena por la reseña.
Reloj contundente en diseño y tamaño. Abstenerse muñecas enjutas, finas tirando a «normales». También puede ser que las muñecas estonias sean colosales.
Por lo que hace al reloj me parece curioso tirando a estéticamente complejo (dentro de mis gustos), hay cosas que no le veo mucho sentido, la verdad: la corona lisa, a las 9 y roscada [no es funcional ninguna de las decisiones y menos con el tamaño, puedes incluso llegar a clavártela (la corona) si no llevas muy ajustado el reloj], mini segundero sobre fondo abierto (¿en serio?), en un reloj de diseño busca un mecanismo visto que sea liso en mate como la esfera no uno gravado [igual ni existe], la manecilla de horas se queda muy corta (para mi gusto)
En definitiva veo errores de diseño y conceptos de primero de relojería.
PD: son opiniones subjetivas y personales.
Buenos días amigos.
Muchas gracias por tu opinión Sergi. La corona te aseguro que pese a su tamaño no molesta. Lo del tamaño es cierto, no es apto para todo el mundo. No tanto por el tamaño de la muñeca, la mía es de 17,5cm, o sea más bien normal, sino por la apariencia de la que resulta. En cuanto a la casi invisible manecilla segundera, totalmente de acuerdo contigo.
Buenos días Javier.
Gracias por contestar a ti. Un pregunta: ¿la corona a las tres es por practicidad, es decir, más fácil darle cuerda ya que angulado la mano hacia «abajo» se le pueda dar rosca?
Por cierto he visto la entrevista en GES, excelente ¿vas a subirla en la bitácora?.
Gracias Javier por tu tiempo.
Sergi, la posición tradicional de la corona, es decir a las 3 es justo para eso, para que sea más fácil de desenroscar, darle cuerda y ajustar la hora. Moverla a las 9 es para que moleste menos cuando se dobla la muñeca o se mueve el brazo.
Jiji, gracias por ver la entrevista en GES, me alegra mucho que te gustase. Tengo previsto subirla aquí, colgaré el MP3 a modo de podcast para aquellos que deseen descargarlo para oírlo sin conexión, y también una transcripción en texto… Esa es la parte que más tiempo me lleva, son casi 40 minutos de charla que requieren de unas 4 horas para transcribirla y publicarla. En cuanto pueda la publicaré.
El trabajo de personalización del calibre en el frontal está chulo, pero en la trasera discrepo, no se han esmerado mucho, solo han hecho ribetes y espigas. Fíjate, un ribete lo terminas y lo rematas con una espiga, y te da para ponerlo en cualquier rincón (si miras cada espacio decorado es fácil darse cuenta de ello, solo tienes que reducir sus dimensiones y andando). Y luego las zonas más estrechas las han grabado con un «piqueteado» triangular. Vamos, que no es un trabajo que esté a la altura de las decoraciones en muchos suizos, por poner un ejemplo.
Y como eso todo lo hará una máquina, tendrá un coste menor aún. Así que supongo que el precio tan elevado no se irá por ahí, igual por otra cosa, pero no por esa elaboración. A mi entender, claro.
Gracias ReflejoCreative. Seguramente sea una decoración realizada casi completamente por máquinas, pero que incrementa el coste por dos. Aproximadamente un ST36 cuesta unos 40€, esta versión unos 80€. Evidentemente nada que ver en comparación con lo que pueden hacer los suizos, incluso usando un calibre base tipo ETA. Claro que esos calibres decorados tienen un precio que ronda los 300€, por ejemplo en el Stowa Flieger.
Bueno, aún que por mi edad el tipo esqueleto no me simpatiza, el reloj es extraordinario y de acabados muy chulos. (El eterno dilema de la corona, jajajaja.)
Me llamó la atención el acabado del movimiento, es impresionante y los materiales, muy buenos según mi apreciación. Gracias por el artículo, como siempre de calidad. Saludos Guti, Sergi y valiosos lectores de esta Bitácora.
Feo como pegarle a dios.
No soy de relojes tipo esqueleto ,este no es una excepción, aunque reconozco que esta realizado con un buen movimiento y buenos materiales.
Muchas gracias por mostrarlo Guti y dárnoslo a conocer ,un saludo para todos.
También yo le doy mucha importancia a la legibilidad Ricardo, es el problema de la mayoría de relojes esqueletizados. En este Peacemaker, con la salvedad del segundero, créeme que se ve todo muy bien, hay buen contraste y las manecillas son de generoso tamaño.
Hay gustos para todos samoa. Gracias por el comentario.
Gracias por la lectura Alfonso, hay tanta variedad de relojes como gustos personales. Creo que a veces está bien salirse de la norma. Relojes de buceo y de aviados hay a miles. Relojes como este Aegaon, ninguno.
Ya el tamaño me echa atrás. Y si tuviese un tamaño razonable para muñecas más bien pequeñas, como la mía, es un reloj para los muy cafeteros de este tipo de diseños.
Me gusta mucho la estanqueidad de 10 ATM por muchos motivos. La corona roscada también, aunque reconozco que igual incordia siendo un calibre de cuerda. Pero igual no y te acostumbras, o para una racha que lo uses tampoco es incordio.
Eso sí, deberían añadirle una advertencia en la caja de mejor no bañarse con él, no sea que te vayas al fondo con él xD.
Por lo demás, no me termina de convencer y gustar. Me gusta en general poder ver maquinaria si todo lo demás acompaña. En muchos «open heart» no me gusta si por ejemplo aprecio que hay tanto espacio entre esfera y tapa del movimiento que se ve mucho hueco libre y que al final la esfera hace tal sombra que cuesta apreciar nada, incluso el mismo volante que es lo que suelen dejar más a la vista. En este no termino de ver las líneas puras, brutas y casi que minimalistas hasta del masivo bisel interno, con ese calibre tan floreado por maquinaria automatizada, o ver por su trasera esos engranajes ahuecados… No me convence, no veo que case una cosa con la otra.
El segundero pequeño mejor habría sido anularlo visualmente en lo posible en mi opinión.
En fin, que no termino de verlo curioso en conjunto en que es mera estética. Sin entrar en el tema de la corona, que al menos la veo ya como un cierto símbolo de marca con cierta continuidad con otros modelos, y que en éste pues sí me casa con líneas de la caja y también acabados del brazalete. Pero el reloj no me convence en su conjunto.
¿Se habrán pensado sacar un reloj de mano con esos estilos de 65mm o incluso más grande? Y si hubiera otros calibre más industrial, con los engranajes completos, acabados cepillados, parcialmente pulidas algunas aristas o alguna parte, quizás algunos engrañajes en latón o color de latón bien destacado así como en el volante… igual les luciría mucho más que estos en pulsera. En plan reloj de bolsillo, y añadiendo en el juego (y también en opción) brazaletes de piel y de náilon como se empezaron a hacer antaño «de pulsera» los relojes de bolsillo de la época. Igual quedaría mejor el asunto (otra cosa es en ventas y posible mercado, ahí ya, ni idea).
Lo de anular una pieza como el segundero pequeño Alejandro a mi siempre me ha parecido una «brutalidad». Si está es por algo. Lo más fácil habría sido darle mayor tamaño u otro colorido más vistoso que destaque. El diseño lo veo muy diferente, y eso me gusta. Hay que apoyar a aquellos que se atreven a crear cosas distintas.
Lo de los relojes tipo de mano podría ser muy chulo. Tengo pendiente hablar con ellos, a ver que me dicen. Gracias por la idea, puede ser muy curiosa.
Nada, nada… en muchas ocasiones, el amputar hace que algo entre donde debe, o que no se extienda y progrese otro mal menor. Tampoco hace falta ser tremendista, basta con pensar un poco con la practicidad de la supervivencia de una lagartija o salamanquesa… ¿qué para salvar la vida y salir airosa ahora mismo me sobra la cola? Pues cola fuera.
Pues algo así. ¿Es que ese segundero qué hace ahí? Al menos y lo mínimo, si lo dejan, pues que le añadan no digo la subesfera completa, pero sí al menos su anillo exterior con escala graduada en 5 minutos por lo menos más o menos integrado en el diseño y acabados del resto del calibre a la vista.
Pero la aguja ahí flotando en la nada sin absolutamente ninguna referencia alrededor… sobra.
Creo que no nos pondremos de acuerdo en eso Alejandro, y es lo bueno, hay relojes para todos. Ya tendremos ocasión de coincidir en gustos en otro reloj. Tengo unas cuantas reviews más pendientes.
Los gustos estan para eso. Para gustar. Yo tengo que ser franco y decir que encuentro horroroso el reloj desde el pi al pa.
Ya comentaba que no es un reloj para todo el mundo ARBcuentatiempos, ni siquiera creo que sea un reloj para usar cada día. No obstante si ya tienes una colección más o menos convencional, ésta es una pieza muy apta para ofrecer algo diferente. Algo que puedas usar ocasionalmente y te transmita algo especial.