Después de los nuevos hábitos adquiridos, uno de ellos ha sido el cuidado y la salud bucal. A falta de las correspondientes revisiones ortodóncicas periódicas, lo llevaba bastante bien, cepillándome tres veces al día durante dos minutos.
El primer paso, fue cambiar del cepillo manual, primero a un Veckia de pilas, que ahora uso en el trabajo, y después a un Braun Oral-B Professional 500. La clave aquí radica que aunque no hay evidencia científica que en general un cepillo eléctrico sea mejor que el cepillado manual, si la hay si comparamos cepillos eléctricos que además de rotación combinan pulsación, como el mencionado Professional 500.
Un cepillo de dientes recargable, y excelente, que el único inconveniente que tiene es el alto precio de los recambios de cabezales. No obstante duran bastante, y en Amazon están muy bien de precio. Sirven casi todos los de Oral-B, e incluso puedes encontrar modelos genéricos, que personalmente no he probado.
Mi rutina de uso son 3 cepillados diarios, del orden de dos minutos y medio cada uno (lo recomendado son al menos 2), y enjuague una o dos veces al día (se suelen recomendar 3).
Lo siguiente era la pasta de dientes. Tradicionalmente usaba el blanqueante de Mercadona, Deliplus Blanqueante 100 ml que sale a 1,25€, y como enjuague el de la misma marca, en la presentación de 500 ml a 1,55€. Las pasta de dientes me gustaba, y por su precio no había nada mejor. Eso sí, de blanquear, poco o nada hacía.
Luego probé la nueva gama Colgate Max White One, con su pasta dental de 75 ml a 2,8€, y el colutorio de 500 ml a 4,70€, es posible que hicieran algo, pero la tonalidad distaba bastante de la obtenida por ejemplo en una limpieza bucal de dentista.
Así que descubrí la pasta dentífrica Lacer Blanc Plus (75 ml y 125 ml), que encontré como promoción en formato de 150 ml 6,90€. El precio es elevado, pero hay que tener en cuenta que dura muchísimo, así que la probé. La sensación me gustó, su sabor no es el típico mentolado, sino que es más bien suave. A las 3 semanas, si que fui notando efectos. No se decir, si simplemente eliminaban las manchas producidas por comida, café, tabaco, etc, o es que efectivamente blanqueaban los dientes. Adicionalmente Lacer, junto a Fluocaril, son las marcas que más he visto recomendar por los odontólogos, así que me daba algo más de confianza.
Satisfecho con los resultados, complementé la pasta de dientes, con el enjuague bucal Lacer Blanc (250 ml y 500 ml), que sale a 7,10€ el grande. De nuevo un precio caro, pero como que solamente son necesarios 10 ml por enjuague, tienes para 50 servicios. En este caso, el regusto que deja es un tanto extraño, pero en absoluto desagradable.
Ambos productos, ofrecen restaurar la blancura natural de la dentadura, en mi caso si que percibo que poco a poco se van tornando más blanco, aunque no se decir cuál será el límite.
Actualizado a sábado18 de enero de 2014. 08:03:
Tras casi 3 meses de uso, puedo confirmar que Lacer Blanc funciona, y mis dientes están visiblemente más blancos que al principio. No se si el efecto será permanente, es decir, que dejando el tratamiento, vayan de nuevo amarilleándose poco a poco, o bien que la pérdida de blancura venga de golpe.
Entre tanto he visto que en cuanto a pasta dentrífica, han aparecido las variantes Lacer Blanc Plus d-Menta y Lacer Blanc Plus d-Citrus. He probado la segunda, con un ligero toque a naranja cítrica, y me gusta más la normal, así que no creo que pruebe la versión de menta.
Hola Javier! Sin renegar de Lacer, tal ves estaría bien comentar que hay una marca. Kemphor, la cual tiene sus laboratorios y producción en España, mas concretamente en Zaragoza, desconozco si tiene alguna blanqueante pero creo que si.
Un saludo
Buen apunte Arturo. Pensaba que la marca Kemphor pertenecía a una multinacional, pero efectivamente, es propiedad de Laboratorios Verkos, una compañía española con sede en Zaragoza. Espero en un futuro poder hablar de ellos.