Hablaban en Duraderos, de los mecheros electrónicos o piezoeléctricos, aduciendo que no compensaban, debido a que generalmente, la parte mecánica que controla el encendido, se dañaba antes que en un mechero convencional la piedra. Es una afirmación acertada, estamos rodeados de productos asiáticos, en los que se escatima en todas las fases de producción, así que al final, acabas teniendo una buena tecnología como la ignición piezoeléctrica, pero que no es duradera.
Necesitaba de un encendedor fiable para mi calentador de manos Zippo, tal vez parezca que su acompañante ideal sería un encendedor de la misma marca. Sin embargo, dentro de las ventajas de los mecheros Zippo, ya sabéis, garantía de por vida, durabilidad muy elevada, resistencia al viento, y fiabilidad a toda prueba, estriba un gran inconveniente. Requieren bastante dedicación para su mantenimiento: cambio de piedra, cambio de mecha, cambio de algodones, … Además, tampoco podemos tenerlos guardados demasiado tiempo, ya que al cabo de aproximadamente un mes, la gasolina se evapora, y tenemos que recargarlo de nuevo. Por tanto, puede ocurrirte que cuando más lo necesites, no puedas contar con él.
Como fan de los mecheros Clipper, para tal menester, usaba hasta ahora un Clipper Fit Electrónico, un encendedor piezoeléctrico, de una calidad aceptable, y que puedes conseguir en casi cualquier estanco por unos 1,5€. Hacía tiempo, tuve un Clipper Metal Micro, el clásico mechero Clipper, pero con una cobertura de metal, que aunque no aportaba ninguna ventaja, me gustaba mucho.
La ventaja de un encendedor piezoeléctrico o electrónico, es que no funciona por fricción entre un metal y un pedernal que hace saltar la chispa, sino que es un efecto eléctrico, que se produce al realizar una presión cuando pulsamos el botón. Además de más cómodo de usar, la piedra no se desgasta, por lo que a igualdad de condiciones, durará mucho más.
El empaquetado está muy conseguido, con una bonita caja de metal, que contiene una alfombrilla protectora, y el encendedor. Un conjunto, que resulta muy adecuado para regalar. Trae también un pequeño folleto en varios idiomas, también el español, con instrucciones de uso, precauciones, y un certificado de garantía válido por dos años.
Descubrí el Clipper Metal Electronic Grande, el típico Clipper como el que yo tuve, pero equipado con un sistema de ignición piezoeléctrico. Lo malo, es que me salía a 12€, y entonces vi el Clipper Metal Jet Flame, un encendedor del mismo tamaño que los Clipper grandes: 7,4cm de alto y 1,6cm de ancho, de ignición piezo-eléctrica, con llama ajustable, recargable, y de esos tipo jet o también llamados turbo, o sea de los que dejan salir el gas a presión, y por tanto tienen mayor resistencia al viento. El consumo de gas, es muy elevado, pero siendo recargable, no hay ningún problema, compramos un tubo de gas de esos de 2€ los 133ml, y tenemos sin problemas 30 o 40 cargas.
Externamente es agradable, con el cuerpo íntegramente fabricado en metal de color satinado. Tiene el peso adecuado para saber que lo llevamos, pero no resultar incómodo. Es decir, más pesado que uno de plástico, y más ligero que los de metal. La caja de regalo, resulta muy conveniente para guardarlo, si como yo, no lo usas habitualmente. Así queda bien protegido. El pulsador, también de metal, es de uso, casi tan suave como un botón, y la sensación que da, es de confianza y durabilidad.
El efecto jet, con ese sonido expulsando el gas, que parece un inyector, es genial. El problema, es que suele encender a la segunda vez, casi nunca a la primera, algo que no he visto que ocurriera con otros encendedores basados en este sistema.
La parte inferior indica Flamagas, y Diseño Registrado, pero no hay información alguna acerca de su país de fabricación, así que uno se teme lo peor, que provengan de mano de obra semi-esclava asiática.
Barcelona (España), Chennai (India) y en Shangai (China).
En eBay.es tenían a 10€. Teniendo en cuenta que un Clipper normal se vende a unos 1,5€, y su versión metálica a unos 5€, no es económico, pero tampoco excesivo. Si lo comparo con un Zippo, que puedes conseguir por unos 15€, y aunque algo más tosco, es Made in USA, tiene una durabilidad y un cuidado superior, obviamente es caro.
En un futuro, me gustaría hacerme con un Ronson, espero que llegado el momento, este Clipper Metal Jet Flame, aún siga funcionando.
Tenía muchas ganas de probar ese Clipper de metal por la razón de que espero -supongo, por precio- que será mucho mejor que los de plástico, pero es muy caro y de momento no me planteo hacerme con él. El caso es que quería hacer una review de un Clipper, cosa que puede que no haga finalmente porque no voy a decir nada bueno de la marca y no me gusta criticar a una marca española y que, además, fabrica en España, pero la realidad es que sus Clipper me decepcionaron muchísimo: malos, más malos que los chinos, menos duraderos, y más caros. Por ejemplo, el mío acabaron derritiéndose los bordes de plástico de la llama, al no tener ventilación (cosa que el chino sí trae, por cierto), y cientos de detalles más (como su diseño redondo, que es lo más incómodo del mundo, y que pareciera inspirado de los austríacos de IMCO pero obviamente un IMCO le da mil vueltas a un Clipper). Por todas esas razones dudo que hable de los Clipper, no merece la pena ni el esfuerzo.
Espero que ese de metal te resulte mucho sea mejor, por precio debería serlo desde luego.
El problema de este modelo en concreto BiaNamaran, es que consume gas, como si fuera un motor V12. Lo bueno que tiene, es que es todo metálico, no como los Clipper tradicionales, que no deja de ser un encendedor normal, con una funda de metal.
Sobre la calidad de Clipper, reconozco que no es lo que era en los 80, y ha ido perdiendo. Pero al menos por mi experiencia, son mucho más duraderos que los chinos. Claro que un Clipper cuesta 1€, y por ese precio tienes 3 o 4 encendedores chinos. Habría que ver si compensa. Seguramente si le recargas el gas, y le cambias la pila sí, en caso contrario, lo dudo.
¿qué llevan, pila? (:D) Jajaja, Guti, no te quitas los relojes de la cabeza 😀
A eso me refería, que los encendedores con metal por fuera y dentro son todo plástico son bastante decepcionantes, al fin y al cabo uno se lleva lo peor de ambos mundos: el peso extra del metal, y la poca durabilidad -ante el calor del fuego, encima- del plástico.
Hola, tengo cantidad de Clipper desarmados , desgraciamente los que llevan encendido piezoeléctricos…. suelen fallar al mes y pico , Mi preferido uno muy lindo de goma suave negra con tubo largo , lo compre en Belgrado una tienda increible con cientos por no decir mil clases de mecheros , y la mitad clipper , por solo 1e hasta 1e 30
como no consiga areglar la parte piezoeléctrica , usare solo los de piedra , se acabo ….
Nota en Cuba es muy preciado, lo reparan y recargan en la misma calle , jajaj pero cuidado el gas es distinto , puede salir la primera llama muy grande…. y huele a butano jaja Saludos
Gracias por tu testimonio y bienvenido FraN. La calidad de los encendedores Clipper está claro que es muy buena. Superior a Bic por ejemplo que tiene más nombre.
Los jet van bien…hasta que hay que recargarlos, como mucho libras la primera vez. Una vez cargado ya no van bien, no sé porqué, y te quedas con un mechero lleno e inservible. Una pena porque fan mucho servicio.
Bienvenido luis. Coincido contigo, una vez recargados les cuesta volver a encender y el gas apenas dura. Algo que no me ocurre con los Ronson Jetlite.
Anda, esta entrada no la había visto.
Pues como este es el que yo me compré hará un mes y pico que comenté en otra entrada de mecheros Champ y Star-I, pero de funcionamiento clásico en vez de tipo jet. Con un color negro (más bien grafito) desde el culo, pasando con un degradado más o menos a mitad del encendedor a ese mismo plata satinado hasta arriba. Y el logo troquelado en el lateral.
No es el Clipper más económico, no (me costó casi 8 euros en un estanco), pero tampoco está mal. El pulsador de paso del gas es lo que más desentona, que sigue siendo de plástico. Por otra parte, no tiene el seguro para niños. Es decir, funciona como debe y se espera de un Clipper, pero tiene una sensación y prestancia que yo al menos agradezco.
Ronson he visto que los tienen en un bazar cercano, su diseño más o menos clásico, de gas, a 1,50 euros. Pero dan pena: de plástico negro enteritos, pesan incluso menos que un Clipper (yo diría que pesan como un BIC que son incluso más pequeños). Sólo el salvallama es metálico (no son jet) y «made in China». Cogí uno al azar, encendía con demasiada llama, le di un toque al regulador que a priori estaba a la mitad, pero seguía igual. Estuve a punto de llevármelo, pensando «total, sólo es 1,50», y no me llevaba así solo el par de pilas D que había comprado. Pero en el último momento hice lo correcto y allí se quedó.
Está el mundillo de los encendedores más que triste, la verdad.
Por cierto, tengo que echarle otro ratito al Dunhill Rollagas suizo de latón macizo (pesa y bastante para lo pequeño y compacto que es) que encontré por ahí por nada y menos. Lo limpié y adecenté, cargué y funcionar funciona. Pero tiene regulada tan fuerte la salida de gas (que me da que se ajuste con el regulador de abajo, que lo tiene un tanto castigado) que pega una llamarada que flipas xD. Con solo abrir la tapa pones la mano encima a la misma altura que esta y notas el chorro de gas con fuerza.
Se le nota mucho la calidad de fabricación de hace décadas. Aunque tampoco debió de ser un encendedor de los más económicos. Contundente en mano, el cierre de la tapa, como funciona el depósito de la piedra, que parece el cerrojo de un Mauser, muy robusto, fuerte y perfectamente mecanizado… es otra historia.
Es un grave problema que hay Alejandro la mayoría de cosas chinas que nos llegan son de pésima calidad, y si lo pensamos friamente, debido a la cantidad de intermediarios en un bazar ya no son tan baratas. Creo que valdría la pena ir aumentando calidad, lo han hecho con IMCO o con algunas marcas de relojes. Ofrecer a buen precio una calidad aceptable o buena.
Pues ya digo, de pena. Un expositor casi entero, de Ronson (al menos la marca la tiene), todos negros en plástico mate con sólo la parte de la llama metálica. Estilo Varaflame, pero sin el pulsador y mecanismo con la tapa-martillo, mucho más simple y barato (claro, como 1,50 €, no como 60 o 100 libras a como tienen los Varaflame en su web).
Hoy he visto un expositor de pitilleras y mecheros piezoeléctricos de Champ. Lo que pasa es que un expositor de temática «souvenir», muy folclóricos, muy para guiris xD. De tipo tubo, aplastados, muy cromados y brillantes, no eran feos, lo que sí muy compactos y pequeños, quizás demasiado para mi gusto (un pelín más anchos y más o menos igual de altos que un BIC desechable). Quizás el adorno se le podría quitar como a los STAR-I de Dakota Lighters, pero no me podía parar demasiado más, y como también me parecían demasiado pequeños…
Eso sí, justo en el estante sobre el que estaban, era todo Zippo. Niquelados, los cepillados, adornados, troquelados… incluso esos que sacaron que son más compactos y estrechos, pero del tipo Zippo clásico. A 39 eurazos «más gasolina» decían… como si regalaran algo.
Los Champ que yo he visto son también tipo folclórico o tipo «porrero». Una pena que no saquen nada más conservador, me gustaría poderlos comparar con mi Champ original, porque en apariencia no se ven mal, similares a los Star Alejandro.
De Ronson, cuando probé los Jet Lite estaban marcados como la marca propiedad de Zippo. En la web de Zippo España también se mencionaba eso recientemente, si bien ahora Zippo.es ya no funciona. ¿Qué estará pasando? Recuperado del caché decían:
Ronson
La Zippo Manufacturing Company adquirió prácticamente todos los activos de Ronson Consumer Products Company y algunos de la Ronson Corporation en febrero de 2010. Ronson llevaba comercializando mecheros desde 1913 y ofrecía una línea variada de mecheros de antorcha y de bolsillo, así como accesorios para la llama.
Historia
La familia Aronson fundó la Ronson Corporation y, más tarde, la Ronson Consumer Products Company. En su origen, el propietario era Louis V. Aronson, que dirigía la Art Metal Works en Newark (NJ), que abrió en 1886. La Art Metal Works fabricaba distintos artículos decorativos de metal, como sujetalibros, pisapapeles, juegos para escritorio, miniaturas y otros artículos artesanos de metal. Debido a la demanda de los clientes, Aronson empezó a explorar el mercado de las llamas y empezó a fabricar mecheros a principios del 1900.
En 1910, a Aronson se le concedió una patente por un sistema de ignición que producía chispas llamado el “Pist-o-liter” y, en 1913, fabricó un mechero de bolsillo llamado “Wonderlite”. En 1928, Ronson aseguró una patente para el mechero revolucionario de una sola acción llamado “Banjo”, que ofrecía tanto ignición como extinción presionando una sola vez. El Sr. Aronson decidió centrarse en el negocio de los mecheros y vendió la empresa Art Metal Works. A lo largo de las décadas, la Ronson Corporation y varias filiales han seguido desarrollando varios tipos de mecheros de antorcha, multiusos y de bolsillo utilizando la marca registrada RONSON, así como líquido inflamable y combustible de butano utilizando la marca registrada RONSONOL. También ha fabricado varios accesorios, incluidos los pedernales de los mecheros y, anteriormente, muchos otros consumibles. En los sesenta, la Ronson Corporation vendió sus operaciones internaciones, dejando a la empresa con la mayoría de las operaciones y ventas en Norteamérica.
En febrero de 2010, la Zippo Manufacturing Company, Bradford (PA), adquirió casi todos los activos de la Ronson Consumer Products Company y la Ronson Corporation of Canada Ltd., así como algunos activos relacionados de la empresa matriz, la Ronson Corporation. Los principales activos fueron las marcas registradas RONSON y RONSONOL y los productos relacionados con ellas. Zippo no adquirió ninguna de las corporaciones ni de los registros u obligaciones corporativos.
Actualmente las marcas RONSON y RONSONOL forman parte de la familia de marcas de la Zippo Manufacturing Company. La línea de productos para las marcas siguen siendo mecheros, combustible y accesorios relacionados comercializados y vendidos en los Estados Unidos, Canadá y México a través de distribuidores y online.