Después de la reseña de las Project Lobster Papa Donald Silver, pensaba en lo afortunado que es un aficionado a las gafas que además apuesta por los productos de aquí, cuando conoce una marca de Canet de Mar (Barcelona), o sea mi ciudad, y con tanta historia como Ernest. Y es que Comercial Ernest S.A se remonta a 1985 cuando Ernest González Fuster decide poner a disposición de la mayor cantidad de personas posibles productos ópticos de calidad y diseño a buen precio.
Pero tienen un problema, y es que por más que lo he intentado, es imposible encontrarlas en alguna óptica que me quede cerca de casa, lo mismo que os expliqué con los cubiertos Made in Spain Idurgo o con los jabones Pardo. De hecho si accedemos al apartado de su web «Dónde comprar», nos aparecen las tiendas de la cadena Opticalia, no despiertan mi simpatía, pero al menos tengo una cerca de casa. La sorpresa es que accedemos a la web de la cadena óptica, y en el listado de marcas que comercializan nos encontramos con Amichi, Custo Barcelona, Hackett, Pedro del Hierro, Mango, Pepe Jeans, Pull&Bear, THELOOK, Trendi, Victorio & Lucchino… Pero no hay hay ni rastro de la marca Ernest.
Para empeorar las cosas todavía más, no venden directamente a particulares por internet, ni siquiera con plataformas de terceros como Amazon. Así que por más que quiera, uno se queda con las ganas de poderlas probar.
Estaréis pensando que quizás no nos perdamos tanto. Otra empresa española que no hace las cosas bien y después se irán quejando… Bien, quizás en la segunda parte acertárais, pero en la primera, rotundamente no. Nos perdemos muchísimo, fijaros que hablamos de un catálogo de más de 800 referencias incluyendo las gafas de sol y de prescripción, para hombres y para mujeres.
No termina ahí la cosa, puesto que como Gafas Ernest no vende a particulares, no muestra los precios, algo que es fácil de encontrar por vías alternativas, y que nos ratifica que sus tarifas son también realmente competitivas. En la colección Sábato cuentan con monturas de titanio al precio de 38,50€ + IVA.
Modelos como el MST-9206 o el MST-9197 que cuestan menos que una montura de acetato o pasta.
Comprendo que con tantas marcas los puntos de venta, esto es, las ópticas, lo tengan cada vez más complicado para obtener el género de sus escaparates. Incluso que opten por no elegir la marca Ernest. Pero entonces, ¿por qué tanta reticencia a vender por internet?
¿Por qué privar a los consumidores de los valores que soñó su fundador? Porque tal y como habéis leído al principio, sus objetivos eran claros, y es algo que desde Comercial Ernest SA aún citan en su página: «Desde 1985, en Ernest nos preocupamos por seguir facilitando la calidad, el diseño, el servicio a buen precio como el día que empezamos: con una gran sonrisa.» Es evidente que tienen diseño, que tienen un buen precio, y si algún día las puedo probar, veremos si tienen calidad. Sin embargo, si hablamos de servicio, y de facilitar el acceso a los productos, tienen mucho que mejorar.
Yo las he probado – ya lo sabes 😀 – y las de titanio son muy ligeras (incluso diría «demasiado», si tienes que ponerle graduación «gorda», cuidado), y las de metal son fantásticas. Como bien dices, muy asequibles además.
Claro que sé dónde las comercializan, y la óptica que las tienen (no un buen servicio el de esa óptica, por cierto). Una pena que no vendan por internet. Espero que no les ocurra como a Miquel Rius, que tampoco querían vender por internet para no competir con las tiendas a las que les distribuían, y acabaron teniendo que cerrar ellos (la empresa la vendieron a Appli Paper, la marca sigue existiendo, pero no la compañía como tal, una lástima con lo bien que atendían en MR).
Buenas tardes D. Javier y Estación Telegráfica.
Creo que sería importante que la Administración Pública debería incentivar que las pequeñas y medianas empresas participaran en los nuevos modelos y canales de distribución. En este caso, puede ser que a la empresa no le interesa por motivos de producción, costes e inversión la distribución directa. Si queréis os cuento que me paso hace dos semanas o tres.
Quería pintar mi piso. Así que al Google: «mejor pintura relación calidad precio». Leí tres o cuatro blogs, visitas a los diferentes Centro de Bricolaje… Creo que soy demasiado reflexivo.
En una de aquellas por el polígono de mi pueblo veo Pinturas Puig…Lo comento a un par de conocidos y me dicen que es muy buena; la de «tota la vida» (toda). Allí me planto en la fábrica, les pregunto con educación que si puedo comprar y… Me invitaron a un café, me hicieron descuento de profesional, un asesoramiento técnico espléndido, me regalaron un rodillo y me pusieron la pintura en el maletero… La pintura buenísima, a la altura de Montó o Valentine profesional (me ahorre unos 80 euros) y me fui con una sensación estupenda.
A lo que íbamos. Perdón. Me comentaron que no les interesaba Amazon o vender en grandes superficies, no podían hacer una inversión tan elevada y no ganaban prácticamente nada con plataformas online.
Tristemente es el caso de muchas de nuestras pequeñas y medianas empresas : _(
En eso mismo pensé Estacion Telegrafica, en MiquelRius. Tenían un producto de estupenda calidad, Made in Spain y a buen precio, y a al final, por no saberse adaptar cayeron en manos de otros que si supieron adaptarse.
Creo que lo que pasa es que es difícil de gestionar Sergi, además claro que las administraciones no suelen poner demasiado cuidado en las cosas. El testimonio que aportas es interesante, pero claro, ¿cómo diferenciarlo de aquellos que sólo se llevarían la subvención como sería el caso de Ernest, y luego continuarían sin vender por internet porque consideran que no deben hacerlo?
D. Javier
Es cierto, muy buena apreciación. No solo una subvención puede económica. Se puede: generar Institutos autonómicos de ayuda a la adaptación tecnológica y canales de mercado (asesoramiento, contactos….); promoción estatal con sellos de calidad; discriminación positiva si se utilizan marcas de proximidades en obras o reformas civiles (es legal porque contamina menos y puede ser un criterio totalmente lícito), promociones de publicidad en medios estatales…
Le contaré,, con su permiso, lo que me dijo mi tío (empresario de exportación de cítricos y fruta):
» Cuando compras mandarinas (o otra clase de naranjas) de Sudáfrica un 20 % más baratas que las españolas (Valencia, Murcia, Andalucía…) lo que te ahorras acabas pegándolo por otro sitio (derechos y medidas de «contaminación») en base a impuestos». Me gustaría a mi ministro de agricultura comiéndose dos mandarinas Valencianas, un plátano canario y mi presidente poniéndose unas New Olimpo [también vale para la oposición].
Gracias por su respuesta. Me encanta esta bitácora.
Tienes razón Sergi, Amazon no interesa (casi no deja margen al vendedor), y los marketplace en general crujen a los profesionales. Un dia me llamaron para ir a montarle una tienda a un empresario que queria empezar a vender sus productos por internet. Despues de analizar su tipo de negocio le dije que no se lo aconsejaba de momento. Al poco empezo a vender sin hacerme caso, y un dia me llamo diciendome: «tenias razon, todas las ventas que he hecho por internet han sido a perdidas». Con esto digo que montar una tienda por montar, o esas que hay clonicas por ahi –como alguna plataforma que se anuncia por la tele- no es siempre aconsejable.
No soy amigo de dejar que las AAPP decidan por uno, la mayoria de las veces no saben lo que hacen. Si Ernest no quiere vender por internet sus razones tendra, pero si lo hace deberia empezar con una infraestructura dedicada al efecto.
Es algo en lo que pensaba recientemente Sergi, ni siquiera cuando todos los políticos se ponen a aparentar, en la reciente época de campaña, vimos a ninguno con una J’hayber, con una mandarina valenciana, con un bolígrafo Inoxcrom, o con un reloj Kronos. Efectivamente si ellos no creen en lo que hacemos, difícilmente podremos cambiar las cosas, al menos no más allá de lo que pueden hacer algunos entusiastas como tu o como yo.
Otra entrada para los cuatro ojos, o los que lo son cuando toca protegerlos del sol… ;-P xD
Una pena. Yo siempre suelo ir viendo a ver qué se cuece en gafas, para no verme con una o las dos que tenga con la montura ya hecha un asco. Las últimas menos mal que encontré una montura en mi óptica de siempre para adaptarle los cristales… al final es una montura Killer Loop (Luxotica), me salieron muy económicas adaptadas y todo. Tiene pinta de que durarán mucho sin ser materiales exquisitos. Y un poco más alegres y frescas, la anterior montura además de que me salió malísima (además de que fue cara, Carrera… que esperen a que repita). Y sigo mirando, para ver si doy con otras que pueda adaptar los cristales de mi segundo par. Paciencia.
Pero a lo que iba, yo no se ha dado el caso, pero me parece que si entro en las ópticas y pregunto por monturas BBB y hechas en España, mucho me da que todas dirán que no tienen nada. Como mucho algo hecho en USA, alguna alemana e italiana, y si no, quién más honesto sea y lo sepa dirá que digan lo que digan, todas fabrican en China.
Lo que más me repatea, es que prácticamente el 99,99% de lo expuesto, es todo… «marquita». Y como ya sabemos, no necesariamente no es sinónimo de calidad (ya ni Ray Ban… también de Luxotica, tengo dos últimas monturas de mi padre, y da pena verlas). La famosa cadena típica en ciertos hipermercados gala, tiene monturas más honestas de calidad y precio, que muchas marquitas. Que si de ropa, que si de diseñadores, y todas con sus clichés… y el precio, «acorde». ¿Dónde quedaron las buenas marcas de de monturas de propios fabricantes ópticos? Estoy hasta el gorro de tener que irle haciendo publicidad a otro y encima pagándolo yo… ¡y por calidad cutre encima! Recuerdo de niño haber tenido unas gafas junto con cristales todo Indo por ejemplo. Y salieron estupendas, sus buenos años aguantaron siendo de pasta. Y no fueron ni de lejos caras (los cristales sí, esto ha bajado mucho de precio en estos últimos años).
Esas gafas no tenían logo. No ibas haciendo publicidad como en otras, que parece que cierto acabado, remate o coherencia se la dejaron en el presupuesto de fabricación y diseño. Pero el cacho escudo bien llamativo en la patilla o incluso en el cristal si compras los suyos, que no falte. Pues aquellas no. Tenían calidad decente, con un fabricante óptico puntero detrás que las ofrecía, y sólo tenía su marca pues detrás de una patilla, lo típico: Indo, la referencia del modelo y de tallas… punto.
Yo creo que triunfarían las monturas así. Y «las marcas», que espabilen, o que se dediquen a lo suyo… que conforme van recortando calidades, cada vez queda más claro que lo suyo es cada vez menos honesto para con el potencial cliente.
Alejandro, lo de las marquitas en las gafas que traen las ópticas tiene una explicación muy sencilla, el abultado margen de beneficio que les proporcionan. En varias ópticas cercanas a mi casa, es fácil ver modelos rebajados en un 30% o incluso más. Obviamente la tienda no pierde dinero a ese precio, lo que ya nos da una pista del abuso que se comete. Por suerte estoy terminando con un reportaje de investigación sobre esos márgenes de beneficio, que creo aportará mucha luz.