Hace casi dos años que probé el Hanhart Chronographen 1882 Pioneer TwinControl, un reloj que gracias a la herencia histórica de la marca, proporcionaba las increíbles sensaciones de antaño pero debidamente actualizadas con el máximo nivel de calidad y acabados que los de Hanhart están acostumbrados a ofrecer. Poco después de la review del Stowa Antea Classic, seguimos en la Selva Negra (Alemania) porque emparentado con aquel TwinControl el Pioneer One ha hecho bastantes cosas que me parecen muy interesantes. ¿Te interesa conocerlas? Pues a continuación te detallo todo lo que tienes que saber sobre el Hanhart Pioneer One.
Ficha técnica
Género | Hombres |
Caja | Acero inoxidable 316L. 42mm de diámetro sin contar la corona. 12mm de alto |
Corona | A presión de acero |
Esfera | Blanca |
Bisel | Rotativo bidireccional de acero |
Cristal | Zafiro |
Lume | Sí |
Trasera | Exhibición roscada |
Correa | Cuero marrón de 22mm de ancho |
Funciones | Hora, minutos, segundos, día del mes |
Resistencia al agua | 10 ATM |
Peso | N/D |
Movimiento | Sellita SW200. 28.800 vph. 26 rubís |
Complicaciones | Carga automática bidireccional, remonte manual, parada de segundero |
Prestaciones | 38h de reserva de marcha. +/-7 segundos por día |
Origen | Made in Germany. Swiss Movement |
Garantía | 2 años |
PVP | 890€ |
Distribuidor | Hanhart 1882 GmbH |
Introducción
En el año 1882, Johann Adolf Hanhart abre su primera relojería en Diessenhofen (Suiza). En 1902 se traslada a Schwenningen (Alemania). A partir de 1920 se une a la compañía su hijo Wilhelm Julius logrando en 1924 hacerse un hueco entre los deportistas, y produciendo el primer cronógrafo del mundo de precio razonable. En 1938 llega su cronógrafo de pulsera monopulsante equipado con su «Calibre 40». Con la llegada de la Segunda Guerra Mundial un año más tarde se extiende el uso de esos cronógrafos entre los oficiales navales y los pilotos. En 1948 lanzan el Admiral, otro cronógrafo esta vez destinado a médicos y oficiales militares. En 1955 Hanhart es el suministrador de relojes para las Fuerzas Armadas Unificadas de Alemania (Bundeswehr).
Con tanta experiencia en entornos tan exigente como los bélicos y las campañas, Hanhart continúa ganándose una reputación por sus precisión y durabilidad, llegando a que en 1962 se convierten en el mayor fabricante de Europa de cronógrafos, en gran parte acelerado por las grandes personalidades de la aviación, el motor, y el deporte que elegían relojes de su marca. Quizás el más relevante fuera Steve McQueen, quien adoptado como imagen de marca de TAG Heuer y Ford, en su vida personal fue un apasionado de Rolex, Hanhart y Porsche.
En 1966 se incorpora a la empresa Klaus Eble, yerno de Willy Hanhart y que a la sazón a partir de 1983 pasaría a regentar la empresa. Desde 2008 la marca se encuentra ubicada a pocos metros de donde se situaba la relojería Johann Adolf Hanhart.
En 2010 Gaydoul Group AG tomó la mayor parte de la empresa, dirigida ahora por Thomas Morf quien estuviera a los mandos de Carl F. Bucherer. La compañía pasaría en 2014 a manos de GCI Management Consulting Munich, poniendo al frente de ella a Felix Wallner, quien a día de hoy sigue siendo su máximo responsable junto a Simon Hall y que sigue manufacturando sus relojes en los talleres propios de Gütenbach.
Como exponente álgido de la personalidad en cuanto a relojería alemana una de mis piezas favoritas era el Racemaster GTM, si bien por motivos de precio deberá ser un candidato de cara al futuro. Por eso motivo, nuestro protagonista de hoy es heredero de todos aquellos modelos, perteneciente a la gama Hanhart Chronographen 1882, el Hanhart Pioneer TwinControl toma el relevo de los instrumentos cronográficos de precisión, pero actualizado con la técnica y la precisión característica de un Made in Germany.
Retomando de nuevo la historia del reloj, la gama Hanhart Pioneer se lanzó en 2011 aunque no fue hasta 2018 que se agregó su última incorporación, precisamente este Pioneer One. Con el paso del tiempo se fueron ampliando sus variantes, agregando nuevas combinaciones de color, e incluyendo series limitadas como el Pioneer One Bronze. El Pioneer One tiene el honor de haber sido el primer reloj de Hanhart con tres agujas. El primero sólo hora fue el Pioneer Preventor 9, que no obstante no incorporaba el bisel estriado.
A día de hoy la familia Hanhart Pioneer One consta de las siguientes referencias:
- Pioneer One White: Con esfera blanca (referencia 762.200).
- Pioneer One Black: Con esfera negra (referencia 762.210).
- Pioneer One Grey: Con esfera gris (referencia 762.240).
- Pioneer One Blue: Con esfera azul (referencia 762.270).
El modelo que analizaremos es concretamente la referencia 762.200-0110, porque uno de los valores añadidos de Hanhart 1882 es que permiten escoger el reloj con diferentes tipos de correa y diferentes longitudes de la misma. El 0110 se corresponde a la de piel de becerro marrón oscuro con remaches y una longitud M. Por cierto que en algunas webs he visto que la etiquetan como referencia HA-057 que no es más que la referencia local de la tienda, no la identificación oficial de la marca.
Presentación
Al recibir el paquete, sentimos como nos sube las expectación. Entre bolas de Porex para protegerlo extraemos una cajita rectangular que va recubierta con papel tipo seda en color blanco. Es un ejemplo de la filosofía práctica alemana, su función es proteger el packaging del reloj, nada más. Acompañado de ésta tenemos también un sobre cerrado con la factura de compra.
Lo que viene a continuación es común para todos los relojes de Hanhart, así que si ya leíste la prueba anterior o lo conoces, puedes saltarte directamente esta sección. Encontramos la caja de cartón en color negro mate que va protegida por una cubierta deslizante. No lleva ningún tipo de marca identificativa.
Con la salvedad de una etiqueta que combina un código de barras o EAN pensado para ser leído por máquinas, con un adhesivo redondo con la referencia del reloj (762.200) que sirve para que la identifiquemos las personas.
Descubriendo la cubierta apreciamos la caja de presentación al completo, en el mismo tono negro y del mismo material, pero ahora firmada como «hanhart 1882» en un bajorrelieve negro brillante.
Dentro encontramos solamente un watchroll, es decir un estuche de viaje de cuero negro. Me encantaría poderos transmitir las sensaciones al abrirlo: el olor a piel que desprende, el tacto agradable e incluso el reflejo del pulido perfecto en sus elementos metálicos.
Extraemos el watch-roll y nos sorprende que es más ligero de lo esperado. En la base de la caja de cartón queda el resto de material que acompaña al reloj.
El interior es de terciopelo negro, muy elegante y de aspecto acogedor y lujoso. Dos solapas de material textil y con el mismo guarnecido protegen todavía más su contenido.
El reloj va firme y suavemente anclado a su base para que no se mueva. Unos botones de funcionamiento tipo automático y con el mismo acabado metálico y pulido del exterior se aseguran de ello. A la vista el reloj no impone, quizás por estar aún medio cubierto con las abrazaderas de cuero, o quizás por la buena marroquinería del estuche.
Entre la dotación adicional que mencionaba, un manual de instrucciones y la consabida gamuza negra firmada por la marca para la limpieza del reloj.
Es extraño que en la zona de descargas de la web no ofrezcan el manual para este modelo en formato digital. Sí que en cambio lo tiene para las variantes con cronógrafo (manual en formato PDF -143 KB.-) o el muy similar Preventor 9 (manual en formato PDF -3 MB.-)
Como ya viene siendo habitual, he publicado en mi canal de Youtube un pequeño video con el desempaquetado o unboxing completo.
Diseño y construcción
La caja es de acero inoxidable grado quirúrgico (316L) y tiene 42mm de diámetro sin contar la corona. Va completamente cepillada en mate salvo un pequeño aro bajo el bisel que es espejado. Con las salvedades obvias como la de no tener orificios para los pulsadores del cronógrafo, es muy parecida en cuanto a diseño y cotas a la del MonoControl y TwinControl, lo que entre otras cosas significa que disponemos de los mismos estándares y grados de calidad que éstos, pero en un reloj que cuesta tres veces menos. En lo personal me parece el tamaño adecuado en un reloj tres agujas que persigue la legibilidad, ofreciendo una buena superficie de esfera. Además, es la elección intermedia entre los 40mm que ofrecen los Mk I, Mk II, TachyTele y Preventor9; y los 45mm de los TwinDicator y MonoScope. Tiene un grosor de 12mm, una cifra a caballo entre la de un reloj automático de índole deportiva y uno de vestir.
La corona está sobredimensionada (8mm). Siguiendo sus orígenes eso facilita su función, operarla con guantes de piloto. Es de acero inoxidable pulido y estéticamente me agrada que hayan evitado la forma tipo cebolla tan vista en relojes con esta inspiración. Va firmada, y es a presión, algo muy meritorio porque el reloj acredita una resistencia al agua de hasta 10 ATM (100M), mucho más de lo que uno espera encontrar en un reloj racing y también superior a lo que su correa recomienda, pero bienvenido sea; porque da una seguridad adicional al propietario.
En cuanto al diseño del bisel, es quizás donde más se reconocen las características de la marca gracias a sus estrías que además ayudan a deslizarlo. Es rotatorio en ambas direcciones, manteniendo la forma y el concepto que hizo famoso a Hanhart permitiendo manipularlo, incluso con guantes. La marca roja a las 12 sirve como referencia visual en la medición de los tiempos por vuelta y como ayuda a la navegación. Es también de acero inoxidable acabado en mate.
El cristal es de zafiro y lleva recubrimiento antirreflejos (AR) en la cara interna. Parece plano pero está ligeramente curvado lo que le da un aire más retro. Pero lo importante es que su legibilidad es absoluta, ofreciendo una transparencia y una falta de aberraciones o distorsiones que es total. A la altura de los mejores cristales que he tenido la oportunidad de probar, y son muchos ya.
Monta unas agujas bastante estilizadas de tipo syringe o jeringa con los contornos en negro mate, lo que mejora hasta la perfección el contraste sobre la esfera. Ese recurso se ha usado en la esfera gris y blanca; mientras que en la azul y la negra están perfiladas de blanco. Un detalle que suele pasar desapercibido es que el extremo del segundero está pintado en color rojo.
Pero hay algo más que habitualmente no se aprecia. El extremo de las manecillas está curvado hacia su parte interior, era una técnica que se usaba con frecuencia en los relojes más trabajados de los años 1950 a 1970, siendo la manera de hacer que vistas desde el cristal parecieran rectas pese al efecto lente que creaba la curvatura de éste. Una práctica que ha quedado prácticamente en desuso como forma de ahorrar costes y facilitar en ensamblado de las manecillas, pero que me entusiasma que esté en este reloj.
Esfera XXXXXXXXX
Algunos critican que lleva el logotipo actual de Hanhart en vez del que usaba entonces y que ahora lleva el 417 ES. Personalmente creo que el moderno refleja que estamos ante un reloj actual y no una reedición u homenaje.
El fechador situado a las 3 es de color blanco, mientras que en el resto de variantes del PioneerOne (negro, azul y gris) es negro.
Tanto las manecillas como los numerales llevan lume tipo Super-LumiNova®. No indican el tipo de compuesto usado, dado que a la luz se ve blanco y en la oscuridad azulado debe ser BGW9. Tampoco se menciona de qué grado o calidad. A juzgar por su rendimiento, que es extremadamente intenso incluso considerando que no hay demasiada superficie, y su duración que supera lo habitual, descartaría el grado estándar, así que nos queda el A o el X1. Lo que es cierto es que me ha sorprendido, no imaginaba que el reloj ofreciera tanta luminosidad en la oscuridad.
La trasera es de acero inoxidable pulido y va roscada. En algunos sitios he podido leer que es atornillada, algo que es evidente que es incorrecto. Lleva una ventana de exhibición que siempre es un plus añadido en cualquier reloj mecánico. No se especifica si el material es zafiro, o el más habitual cristal mineral. Probándolo con mi detector de dureza puedo confirmar que es zafiro, así que otro punto positivo para el Pioneer One. Aunque no son relojes de tirada limitada sí que cada unidad está numerada. Así podemos ver el «762» identificativo del modelo, y luego el ordinal único de cada uno, en mi caso la «442».
La correa de piel de becerro en color marrón oscuro con los pespuntes de las costuras en color blanco es muy similar a la del TwinControl que ya probé con la salvedad que en aquel caso tenía 21mm de ancho en las asas y en este es de 22mm. Se vende por separado a 99€.
Las tachuelas o remaches, en sendas piezas de la correa refuerzan ese aire de pioneros de la aviación, de dónde probablemente venga la denominación de Pioneer. Son de metal pulido y muy redondeadas. En cuanto a la piel es gruesa como lo eran en aquellos tiempos, pero bastante flexible y cómoda.
La hebilla es de acero cepillado y va firmada por «hanhart» a diferencia de la que llevaba el Pioneer TwinControl de 2019.
Como explicaba en la presentación, la marca nos da la posibilidad de escogerla en diferentes variantes: color negro, y negro sin remaches. Además de eso se ofrece en diferentes longitudes, lo que hará que se adapte mejor al perímetro de nuestra muñeca propiciando que siempre esté centrado y ahorrándonos el incordio de que el extremo sobresalga demasiado o demasiado poco de la trabilla: S (13cm a 17,5cm); M (14,5cm a 20cm) y L (17,5cm a 22,5cm). Hay que remarcar que las tallas son efectivas, es decir miden el perímetro real de la correa, así que si te gusta llevarlo algo holgado, tenlo en cuenta porque quizás debas pedir un tamaño superior.
No se proporcionan datos oficiales de peso, un detalle que he solucionado fácilmente con mi balanza de precisión: 84,2 gramos en mi configuración.
Como novedad en esta reseña he capturado un vídeo de 360º con el reloj, algo que algunos de vosotros me habéis ido sugiriendo y que confío en que os sea de utilidad a la hora de hacernos una idea más concreta de cómo es el reloj desde cualquier ángulo. Poco a poco iremos mejorando en ese sentido.
Movimiento
Los de Hanhart han recurrido a un movimiento suministrado por la suiza Sellita, el SW200-1 que es la alternativa al conocido ETA 2824-2 que a día de hoy es raro encontrar fuera de marcas de Swatch Group. Sus características son equivalentes, si bien incorpora algunos cambios que le hacen disponer de 26 rubís en vez de 25. Es un calibre mecánico de carga automática con rotor de carga bidireccional, late a la elevada frecuencia de 28.800 vph (4 hercios), cuenta con parada de segundero (hacking), remonte manual (handwinding) y paso rápido de fecha.
Nunca lo he comentado, así que decir que el origen del Sellita SW200 se remonta a 2004, poco después de que ETA anunciara que iba a limitar el suministro de sus calibres a marcas externas a Swatch Group. La revisión 1 del SW200, es decir el paso del SW200 a secas hacia el SW200-1 ocurrió en 2007. Fue la época en que muchos relojeros se quejaban de la fiabilidad de los calibres de Sellita, así que la actualización sustituyó 3 piezas para así reducir el desgaste y aumentar la resistencia ante impactos.
Los de Hanhart Chronographen han escogido una maquinaria en grado Spécial (Elaboré) que trae una decoración algo más trabajada y ofrece mejor rendimiento. Entre sus prestaciones ofrece una aceptable reserva de marcha de al menos 38 horas y una precisión ajustada a 3 posiciones con +/-7 segundos/día de variación media y un máximo de 20 spd. Sin embargo, todos los movimientos son re-regulados a 0/+8 segundos por día en el taller de Gütenbach. Además montan un rotor personalizado en color negro que luce la marca roja presente en los biseles como homenaje.
En varias ocasiones he hablado de él, por ejemplo con el Davosa DAV3021 del Davosa Argonautic BG o sin ir más lejos el Oris Aquis Date que aunque bautizado como Oris 733, es un calibre Sellita SW-200 en grado Special, justamente el mismo que en el Hanhart. Tenéis todos los detalles en sus especificaciones técnicas (3,2 MB. en formato PDF).
Ante la prueba del cronocomparador los resultados no han sido buenos.
Aunque la estabilidad es muy buena (no hay beat-error), la desviación diaria de 18 segundos por día es excesiva para lo que alguien podría esperar de un calibre así, más aún en un reloj del prestigio cronográfico de Hanhart. Hay que decir que está dentro de las tolerancias de Sellita (a diferencia del Iron Annie Cockpit/Flight Control 5156), pero lejos del objetivo que se marca la marca de un máximo de 8 segundos diarios. Vista su consistencia me inclino a pensar que se trata de un problema de desajuste o falta de ajuste, y no de que la maquinaria tenga algún problema. ¿Acaso olvidaron regularon en Gütenbach? No me cabe en la cabeza que se les pudiera escapar y no lo detectasen.
Me sentí decepcionado y contacté con Hanhart adjuntándoles la imagen del cronocomparador. Se extrañaron mucho, y me indicaron que me dirían algo lo antes posible. Al día siguiente me respondió otra persona diferente a la que había contactado: el maestro relojero y que a su vez era el jefe de producción de la marca. Se disculpó personalmente por el problema y me confirmó que desde hace varios años tiene implantado un control de calidad 100% en los movimientos. Quiere decir que todos sin excepción se inspeccionan y se regulan al rango de 0-8 segundos/día. Esos controles se extienden al calibre una vez montado dentro del reloj. Se coloca el reloj completo en un watchwinder y se comprueban esas mismas tolerancias. Me comentaba que el fallo probablemente se habría debido a problemas en el transporte. En el pasado cercano se habían encontrado con problemas debidos a los campos magnéticos, por ejemplo al usar vehículos de reparto eléctricos. Me confirmaba también que lo investigarían internamente y me hacía llegar una orden de recogida de UPS para que vinieran a por el reloj sin ningún coste para mí. El mismo día en que recibí la respuesta del responsable de producción, solicité la recogida.
Al día siguiente el reloj había llegado a sus talleres y lo revisaron un día después. El maestro relojero confirmaba una desviación ligeramente peor que la reportada (+23 segundos/día), y que tras medir el magnetismo se confirmaba el fallo. Procedieron a desmagnetizarlo, y sin necesidad de regularlo el reloj arrojó +3 spd en todas las posiciones. Es decir, el ajuste inicial era correcta y su único problema había sido la magnetización durante el transporte. Me ofrecieron quedárselo unos días y así supervisar su marcha en el watchwinder que confirmó los 3 segundos/día y midiendo una reserva de marcha de 41 horas.
Cuando lo volví a tener de vuelta venía protegido en un pequeño y agradable estuche de cortesía firmado por la marca, así como de un papel detallando el servicio en garantía y las operaciones realizadas: Chapeau. Volví a colocarlo en el timegrapher y el resultado fue literalmente inmejorable, 0 segundos al día.
Sensaciones
Conociendo la historia y su asociación con el mundo del deporte y del motor, no puedo ser imparcial en cuanto a sensaciones, ya que me siento parte de ello, de lo que el Hanhart Pioneer representa. Son relojes exclusivos en el sentido que no son piezas producidas masivamente. Van enfocados a los entusiastas de la relojería mecánica que al mismo tiempo valoran su herencia en cuanto a calidad y precisión de los tiempos dorados de la automoción y la aviación.
Al mirar el Pioneer One siento algo especial al ver que han mantenido el bisel estriado con la característica marca en rojo. Algo indisimulable por lo diferente que es y que representa una de las señas de identidad en la historia de Hanhart. Diría que más todavía que sus pulsadores de reseteo del cronógrafo en color rojo. Es como formar parte de la historia relojera gracias a la incuestionable inspiración sobre el Hanhart Chronograph 417/417 ES de la década de 1950.
El bisel bidireccional será algo que cueste a los aficionados, pero es que desde siempre fue así en Hanhart, así que para ser fieles a su historia es algo que no puede cambiar. Los más conocedores os estaréis imaginando un bisel que gira loco como en el Undone Basecamp o los Vostok Amphibia. Es difícil de explicar, pero no es eso. El bisel gira muy suavemente como en ellos, pero opone algo más de resistencia. Para que os hagáis una idea sería como el de un diver, pero sin puntos de fijación o clic. Eso permite colocarlo exactamente en la posición que queramos y tener ciertas garantías de que un roce accidental no lo vaya a desplazar.
Por supuesto lo suyo es aspirar a uno de sus cronógrafo (chronographen) que son la esencia pura de la marca, pero por motivos de presupuesto, e incluso por el deseo de la falta de complicaciones, el One es una opción mucho más práctica y razonable que proporciona unas emociones muy similares. Hay que tener en cuenta que al ser algo más ligero, pero mucho más fino (12mm en vez de 15 o 16mm) le permite convivir con puños de camisa y lo hace más polivalente.
El reloj está tan bien producido que como ejemplo de marca premium uno se anima a pedirles más. Y es que dado que los relojes son ensamblados a mano en el taller, ¿por qué no ofrecer más opciones de configuración y personalización a los clientes? Me refiero a poder escoger si queremos el bisel estriado de esta unidad o bien uno fijo como ocurre en otros modelos de la marca; poder escoger entre diferentes grados de calibre, aunque ello implicara un sobre coste, o tal vez elegir entre varios compuestos de lume. Creo que aportaría mucho valor, creando unidades que serían casi únicas.
Conclusiones
Este Pioneer One me ha encantado, creo que ha quedado claro en el análisis. Objetivamente es un gran reloj al que no le falta de nada. Pero si además en lo subjetivo valoras las mismas cualidades que yo: Historia de la marca, diseño tradicional, y su asociación a la era dorada de las carreras y la aeronáutica, sin duda este es tu reloj. Si lo comparamos con algo parecido en cuanto a características y concepto, el TAG Heuer Carrera Calibre 5 (WAR201E.BA0723) el Hanhart resulta más de 1.500€ más económico. Siendo relojes diferentes, pero con una inspiración y prestaciones similares el Longines Flagship (L4.974.4.92.6) tiene una tarifa de 1.420€. Incluso un Christopher-Ward C65 Sandhurst es más caro (1.050€), si bien su calibre está certificado C.O.S.C.
Además del estupendo servicio post-venta que han demostrado tener, algo que me inspira mucha confianza es que disponen de servicio técnico oficial en España, tanto en garantía como fuera de ella. De hecho corre a cargo del maestro Manel Alabart, implicado también en Trigalux® – Relumer. Por contra, los puntos de distribución físicos son casi inexistentes lo que nos fuerza casi obligatoriamente a comprarlos online. Vale la pena pagar los 890€ en su tienda oficial que incluyen el envío a cualquier parte del mundo por UPS y el IVA, así que no tendremos sorpresas con las aduanas. Como curiosidad y tras mucho buscar en comercios europeos el descuento nunca ha ido más allá del 10%.
Es una cantidad respetable, pero en la línea de otras marcas germanas como STOWA GmbH y EZA Watches. Aunque cueste de creer el precio no me parece exagerado, más bien al contrario, porque percibo el esfuerzo que están haciendo en la marca para optimizar procesos y eliminar gastos para así contener el precio, pero sin tener que renunciar a la calidad o al servicio. Prueba de ello es la comparativa contra el TwinControl que cuesta 2.340€ y donde esencialmente la diferencia es el cronógrafo con un ETA 7750 modificado.
▲ Más | ▼ Menos |
Diseño legendario Garantía postventa |
Falta de personalizaciones (opciones) Poca distribución, excepto online |
Valoración
Diseño | 9 |
Materiales | 8 |
Acabados | 9 |
Rendimiento | 8 |
Calibre | 8 |
Prestaciones | 10 |
Precio | 6 |
MEDIA | 8,3 |
Que la atención y disculpas dispensadas hayan provenido de un cargo tan relevante en la compañía dice mucho del grado de confiabilidad que ésta tiene sobre su producción final. No me entusiasma mucho la tipografía de numerales de esta variante, pero sin duda en el bisel y los acabados se percibe la exclusividad de este reloj, una excelente reseña, muchas gracias.
Qué reloj más bonito, aunque bajo mi punto de vista le sobra el fechador.
Entiendo lo que quieres decir jostma. La tipografía de numerales de los otros Pioneer, más ensanchada que se ve más vintage. Personalmente la de esta versión la encuentro más elegante, aunque sobre gustos, los colores.
Es un reloj con un diseño muy atractivo Bia Namaran. Recoge todo lo bueno de los relojes de carreras y de aviación de la época. Casi todos los relojes quedan mejor sin fechador, pero eso les hace perder bastante utilidad, en mi opinión. Así que es un compromiso en el que yo suelo inclinarme a con ventana de fecha.
Grandioso reloj!!
Definitivamente un reloj para que me compre el día de mi jubilación jajaja.
Preciosa la carátula, los materiales y movimiento muy buenos, el precio definitivamente lo vale y el fechador no me intranquiliza para nada.
Muchas gracias por la excelente reseña Guti. Saludos.
Tremendo reloj Guti! Sobrio y con mucho encanto, de verdad que conocía muy poco de relojes alemanes, pero hacen las cosas bien. Me sorprende esa resistencia al agua tan alta para ser el estilo de reloj que es, me parece algo de aplaudir. Y ese lumen, que pasada. Preciosa adquisición que los disfrutes mucho XD
Una pieza de esas que ya enamoran nada más verlas RICARDO. Créeme que llevarla es algo fabuloso, así que no se me ocurre mejor premio de jubilación.
Desde hace un par de años para acá me he ido aficionando a la relojería alemana, y es que creo que a estas alturas y a igualdad de precio están muy por delante de lo que ofrece el establishent suizo Cesar jose Maestre. Es verdad que hay casas suizas que están bien, pero son marcas más jóvenes en vez de las que todos tenemos en la cabeza.
El reloj es que es perfecto se mire por donde se mire, e incluso sorprende el cuidado que han puesto en elementos que otros dejan de lado. El lume es potente y está bien aplicado, algunos no le prestan cuidado, pero se explica en un reloj de piloto. Sin embargo la resistencia al agua es la deseable en un reloj así, todo ello sin resultar mazacote ni recargado.
Buenas tardes Javier, Ricardo, Jostma, Cesar, Bia… y resto de amigos.
Reloj de calidad suprema y atención al cliente espectacular. Mirado con prespectiva creo que es un reloj que si te gusta pues está rozando eso que tanto valoramos y se llama honradez. Vale un pasta PERO te mido hasta el último detalle. No es de extrañar que tiene que competir con marcas que invierten un montón con publicidad y con mejores canales de distribución (tiendas o distribuidores oficioales).
La correa entera de con curtido a las dos caras (vuelta) me resulta apriori que debe ser calurosa aunque el becerro suele ser blandito. Este reloj lo veo con una nato de cuero marrón clarito (no sé por qué).
Un buen reloj amigos (espectacular la 360).
Buenas tardes amigos.
Estupenda reseña. Aunque hablo no debería hablar por otros, nos tienes ya malacostumbrados.
Me ha llamado la atención que el reloj estuviese magnetizado. Yo pensaba que para que algo así ocurriese había que hacer una burrada como dejar el reloj al lado de aparatos que emiten campos magnéticos potentes, como altavoces de gran tamaño o neveras.
En cuanto al bisel rotatorio, es un elemento que en los relojes últimamente considero muy útil. Si llevas un digital, lo más seguro es que ya dispongas de una alarma o de un cuenta atrás que te avise del comienzo de un evento como una reunión o similar. En relojes con agujas, mecánicos o de cuarzo, un bisel rotatorio proporciona una funcionalidad parecida, y me empiezan a interesar otros biseles más allá de los habituales en los relojes de buceo. El de este reloj me ha gustado mucho.
Esas son las marcas que crecen Sergi, las que lo hacen bien ofreciendo algo diferente. La correa es algo calurosa dentro de ser cuero, básicamente por el grosor, pero por supuesto nada comparado a una textil o una de caucho.
Me alegra que te guste el 360, es algo que personalmente me cuestiono, pero como sois varios los que me decís que os sirve y que ayudan a la review, pues seguiré con ellos. Muchas gracias.
Eso es lo mismo que yo pensaba en cuanto a magnetismo un relojista. Si bien los 4800 A/h que son lo que la mayoría de relojes aguantan (unos 200 gauss) que es suficiente para un uso normal. El problema es que los altavoces voluminosos, pero sobre todo los potentes imanes de neodimio que hoy en día hay en cierre de bolsos y similares ya son muy potentes si el reloj está cerca. Sin embargo el problema que me sugirieron consiste en las furgonetas de reparto eléctricas, y eso si que es una casuística nueva que casi nadie había tenido en cuenta. Al final generan un campo electromagnético al que se expone la carga durante medio día o un día entero y que va sumando.
Estoy viviendo una experiencia parecida a la tuya. El bisel es un espacio inútil y necesario para anclar el cristal. Entonces, ¿por qué no darle una utilidad? No importa si lo usamos como tiempo de buceo que es lo normal, o como escala taquimétrica, o telemétrica o con los puntos cardinales para poder orientarnos en base al sol. Es una forma de aprovechar ese espacio y darle mayor utilidad al reloj.
Un placer que te haya gustado el reloj, y también que te haya gustado la review. Mis niveles de exigencia son elevados y les dedico muchísimo esfuerzo, que esté a la altura y no decepcione es el mejor premio a todo eso. De nuevo, muchas gracias.
Guti sabiendo que son tus primeros vídeos no voy a ser muy mordaz, además creo que tu mismo ves el principal fallo del vídeo de la revelación (unboxing y desempaquetado no me terminan de gustar): encuadre, encuadre, encuadre. Lo más importante de una foto o un vídeo es el encuadre, luego van el resto de cosas.
Pero como ya lo dijo un sevillano: «Caminante, no hay camino, se hace camino al andar…»
PD: reconozco que no tengo valor para hacer vídeos.
Te agradezco mucho la crítica y la franqueza Fernando. Soy novato y el tema de los encuadres lo vi tras unos cuantos videos. Al final ha sido cuestión de un trípode y una ubicación ligeramente diferente para que así mejoren las cosas. Por ejemplo en este de aquí ya se notan los cambios: https://www.youtube.com/watch?v=e0W3-K6zF4M
Me ocurre un poco como a ti, soy nuevo consumiendo vídeos, generalmente no me gustaban, y eso se nota también a la hora de grabarlos. Por otro lado al ser todo nuevo, me consume muchísimo tiempo. Me refiero a que si exigiera lo mismo en los vídeos que en las reviews, los vídeos deberían estar hechos en diferentes tomas, luego montados, algo de postproducción en el sonido, una intro y un fin… Pero no lo tienen, esas cosas que a alguien con experiencia le llevaría una hora o menos a mi me llevarían al menos 5 o 6 veces más. Y honestamente, no llego a todo.
Por eso decidí rodarme haciéndolo todo en un plano secuencia, sin cortes. Lo grabo, y una vez terminado lo mando de una a Youtube. Eso me permite ir aprendiendo, aunque sea despacio, y al mismo tiempo seguir teniendo tiempo para las reviews tradicionales en texto y fotografía.
Pero no quiero quedarme ahí, quiero seguir introduciendo mejoras poco a poco.
Guti la verdad es que consumo bastante vídeo, básicamente de los canales a los que estoy suscrito que suelen ser de ingeniería, mecánica, ciencia (divulgación) y de vez en cuando refitoleo y encuentro nuevas «joyas» (para mi, obviamente).
Un trípode, por básico que sea, marca la diferencia y mucho. El vídeo del «Oris Calibre 400» tiene muy buena calidad: el encuadre es correcto y como locutor no se te da mal. Al menos a mi tu voz me gusta como queda, resulta agradable, se escucha bien, en un tono normal y se entiende perfectamente con buena vocalización, lo que a veces es difícil. He visto hasta la mitad a x2 y aún así se podía seguir sin perder nada.
Hacer el vídeo en un plano secuencia parece lo obvio si no quieres meterte en montajes, pero eso conlleva hacer la toma «perfecta», sin errores… y eso es sumamente difícil. Como dato anecdótico creo recordar que el plano secuencia más largo es una película entera de 99 minutos de duración (el disco duro de la cámara no daba para más), un simple error en el ritmo y se tendría que haber empezado de nuevo.
De todas formas basta ver los primeros vídeos de gente como Jaime Altozano para darse cuenta que todos han comenzado desde el principio, como es de esperar.
Gran trabajo.
Muchas gracias Fernando porque tu opinión, más aún siendo un consumidor de vídeos experimentado me anima mucho. Si te soy sincero ya digo que en mi caso tengo un nivel de exigencia muy alto y mis metas no están en las reviews profesionales, sino más allá de ellas, algo que creo que en formato web he logrado tras mucho tiempo y esfuerzo.
Cuando veo estos vídeos tan pobres, siento y soy consciente de que no están a la altura, así que pese a todo si son pasables, ya me ayuda a seguir.
Buenas tardes Javier, Fernando y resto de amigos.
Es cierto que algunas veces queda el reloj fuera de plano, pero es cuestión de práctica. Has de tener presente el fondo y la iluminación… de todas maneras tus reseñas audiovisuales son de apoyo a la palabra escrita de la bitácora… poco a poco irás mejorando.
Trucos: no levantar en exceso los objetos, No sacarlos de fuera de plano a dentro….
Buenas tardes amigos.
PD: a mi particularmente me gusta.
Gracias por los ánimos Sergi. Es curioso como cuando empiezas no sabes lo suficiente como para ver lo que está mal. Es a medida que vas haciendo vídeos, que vas probando cosas nuevas y por supuesto que vas viendo lo que hacen otros que te das cuenta de esas cosas que ahora parecen tan obvias: encuadre, iluminación…
uff, menudo aparato D.Javier; y pedazo de artículo. Realmente una pieza muy bonita con un movimiento de esos que piensas, «si, lo lleva»; amén de su diseño bonito.
Muchas gracias Sergio RV Hyuga. Son de esas piezas que uno está orgulloso y que creo me acompañarán siempre.
Otro reloj alemán blanco y sobrio. Me gusta mucho casi todo, pero a este nivel de precio uno (cada uno a su manera) tiene que quedar encantado al 100% con los detalles y no es mi caso, aunque por otro lado, se agradece la magnífica atención al cliente.
Mis «quejas» son dos y añado una duda:
1) No me gusta la tipografía del 6/9. Están «sin terminar» para mi gusto.
2) El fechador y el índice de las 3 no me parecen compatibles. Preferiría que estuviera sólo el fechador, o el número 3 sin fechador.
La duda es acerca de la marca roja del bisel. En algunas fotos parece «arrugada» como una pegatina mal puesta, pero entiendo que será por la iluminación, ya que en otra de las fotos sí parece que se hayan mecanizado perfectamente un par de estrías y que está también perfectamente pintada.
A mi sí que me gusta el 6 y el 9 WR_100. No es una fuente muy legible, pero sí muy vintage. En cuanto a la marca roja, no es un adhesivo que vaya sobre el bisel y se vaya a caer. Debe ser metal que va soldado. El aspecto pegatina de hecho lo parece incluso en algunas fotos oficiales de la marca. Me imagino que el motivo es porque su base no es lisa, se asienta sobre el troquelado del bisel, así que aunque en realidad esté recto, a veces parece que no.