Llevaba un tiempo intentando aclararme acerca de los resultados de Casio. A la vista de todos está, que en lo que a relojería se refiere, parece que llevan años en una trayectoria de producir modelos que los entusiastas de siempre no desean.
Parecen obsesionados por convertir todos sus relojes a analógicos y ana-digis, eliminando de su catálogo todos los modelos digitales. Además, encarados a un falso segmento premium, sus relojes son cada vez más caros e inaccesibles. En ambos casos, es una contradicción a sus fundamentos. Si algo era característico en la relojería de Casio, eran precisamente sus relojes digitales, tecnológicamente avanzados, y a precios apto para la mayoría de compradores.
Si nos fijamos en los relojes que lleva la gente por la calle, la mayoría de Casio que veremos son de la gama Collection, los más asequibles, y con un toque vintage, que hace que se los conozca también como retro u old-school. Modelos que usan la misma tecnología de hace 30 años, y que son de gamas bajas. No queda ni rastro de aquella gama media, que tanto éxito cosechó gracias a su calidad y duración. Se revalorizan los modelos clásicos, no ya por nostalgia como ocurría antes, sino por gente que busca un tipo de reloj, que Casio ya no dispone (digital, caja de acero, cristal mineral).
Fue a cuento de la lectura de ZonaCasio con Brutal descenso de Casio en Japón (y lanza un comunicado urgente de revisión de previsiones) y en especial con ¿Realmente Casio vende ahora más que antes?, que decidí continuar con mi investigación acerca de los números de Casio, e intentar sacar algo en claro.
Lo que os muestro a continuación es una información recopilada por mi, en base al histórico de balances anuales que podemos encontrar en el Portal del Inversor, dentro de la sección Annual reports (2001-2015), pero que representan las cifras correspondientes a 20 años (1996-2016).
Como en las cuentas de resultados que presentan, hay multitud de valores, tanto cuantitativos, como cualitativos, me he centrado en unos pocos:
– Facturación (Net sales): Facturación del ejercicio en millones de yenes.
– De los cuales relojes (Timepieces): Desglose de la facturación correspondiente a la división de relojería en millones de yenes.
– De los cuales electrónica de consumo (Consumer): Desglose de la facturación correspondiente a la división de electrónica, que incluye relojes, diccionarios, calculadoras, impresoras, móviles, instrumentos musicales, cámaras, … Cifras en millones de yenes.
– Beneficio (Operating income): Beneficio operativo del ejercicio. Es decir, lo que les queda en la caja en millones de yenes, antes de pagar impuestos.
– Resultado neto (Net income): Beneficio del ejercicio, una vez pagados los impuestos, recibidos intereses e inversiones, etcétera. En millones de yenes.
– Gasto en I+D+i (Research and development -R&D): Inversión en investigación, desarrollo e innovación para el ejercicio en millones de yenes.
– Número de empleados (Number of employees): Cantidad de empleados a la finalización del ejercicio.
Debo puntualizar algunos detalles. El primero es que a partir de 2010, decidieron reestructurar sus divisiones contables, de manera que la división de relojes, pasó a engrosar la bolsa de electrónica de consumo, y por tanto nos es imposible estudiarla por separado, o tener correlaciones entre los dos intervalos (1996-2010 y 2010-2017). Los números correspondientes a 2016, son una extrapolación oficial, generada en base al ejercicio 03/2015 al 03/2016, y que debería representar una idea general del 2016. Las cifras de 2017, son también una previsiones, creadas conjuntamente con la marca y sus asesores.
A nivel de facturación, lo que en su caso es una conversión directa de las ventas, vemos una trayectoria descendente, es decir, venden en conjunto cada vez menos, siendo 2008 su mejor año, y 2013 el peor, con una reducción de casi el 54%. A situación de 2015, esa descenso es más suave, representando el 46% sobre el citado 2008.
La división, de relojes, se mostró estable en cuanto a ventas en el período del que disponemos de datos, con la peor cifra en 2002 y la mejor en 2008 (su mejor año), la variación máxima en esos años fue del 29%. Sobre el total facturado, los relojes representaban entre el 12% (2006-2007) y el 20% (2000) de la cifra de negocio.
Una vez integrados los relojes dentro de electrónica de consumo, no podemos extraer conclusiones, pero si nos mantenemos en la premisa de que sus ventas eran estables, vemos que los cambios en esta división, deben venir representados por la volatibilidad de ventas en instrumentos musicales, calculadoras, cámaras digitales, etcétera. Recordemos que aquí, no entran los proyectores, ni las cajas registradoras, pues ellos los contabilizan dentro de Equipamiento (System equipment).
Quizás en este gráfico comparativo entre la facturación total, la división de relojes, y la de electrónica de consumo, lo veamos más claro:
En cuanto a beneficio, apreciamos que aparecen ciclos de 6-7 años buenos, a los que les sigue un ejercicio malo (en negativo). La compañía reacciona, es decir, reduce costes, y vuelve a dar buenos resultados al año siguiente. El margen que obtienen sobre la facturación fluctúa entre casi el 11% (2015) y casi el -7% (2010), quedando la media en un 4% aproximadamente. Es patente que la tendencia del margen de beneficios va en aumento, pues mientras que las ventas están más o menos estancadas desde 2011, el margen ha aumentado paulatinamente en esos años del 3,5% (2011), al 10,9% (2015). Aumentar el margen, sólo se puede conseguir de dos maneras, o bien subimos el precio de venta, con lo que la facturación subiría, y como vemos no es el caso de Casio, o bien reducimos costes, que es lo que han hecho.
El resultado neto, sigue una curva parecida a la del beneficio, como es lógico. Sin embargo, aparecen años de pérdidas, pese a que antes de pagar impuestos estaban en positivo, como es el caso de 1999. Sin embargo van generalmente parejos, y se aprecia una trayectoria ascendente sobre los beneficios. Es decir, después de pagar impuestos, el resultado es más próximo al de antes de hacerlo. Sólo hay dos formas, o bien pagan menos impuestos, o bien las inversiones y los intereses que suscriben son más rentables. En el primer caso, quizás la legislación japonesa haya cambiado, y tributen menos, o puedan desgravar algunos conceptos. En el segundo, podría ser que tuvieran inversiones incluso en otras compañías que les dieran más réditos que la propia Casio.
Si prestamos atención al margen en el resultado neto contra la facturación, su media es de el 1,7%, con un valle del 4,9% (2010), y un pico del 7,8% (2015). Los datos indican que invertir en Casio, es algo rentable, pese a que facturen más o menos lo mismo, cada vez ganan más a nivel operativo, y porcentualmente aún más en cuanto a resultado neto.
Ahora nos podemos fijar en el gasto en Investigación y desarrollo, para mi una partida clave en una industria tecnológica como la de Casio, observamos claramente su tendencia descendente. con una media de inversión del 3,1% sobre la facturación, pero que ha ido variando de su máximo del 4,6% (1998) al mínimo del 2,1% (2015). Esto es un indicativo, de cómo un recorte que aplican es reducir gastos en innovación, todo ello en su ejercicio récord en cuanto a beneficios.
Pasemos a revisar la cantidad de empleados que tiene la compañía, con una media de 13.800, pero que progresivamente se ha ido reduciendo de los 19.325 (2000) a los 10.992 (2014). Además, han reducido el número de factorías, especialmente en Japón, para trasladar sus manufactura a China. De 20 centros de producción que tenían en 2001 (Hong Kong, Corea, Taiwan, Malasia, Singapur, India, China -Zhuhai-, China -Zhongshan-, China -Shenzhen-, China -Guangzhou-, Tailandia, Malasia -Asahi-, USA, México, Japón -Yamagata-, Japón -Micronics-, Japón -Aichi-, Japón -Saitama-, Japón -Kochi-, Japón -Kofu-), han pasado a solamente 7 en 2015 (Hong Kong, Taiwan, China -Zhongshan-, China -Shenzhen-, Tailandia, Japón -Yamagata-, Japón -Saitama-).
Todo ello nos explica como han podido aumentar su beneficio, con una facturación similar. Reduciendo costes, o si se prefiere el eufemismo, optimizando procesos, y aprovechando sinergias.
Como yo lo veo, está claro que invertir en Casio parece una buena opción. Pese a que vendan menos que en sus mejores tiempos, consiguen beneficios más altos. Lo hacen reduciendo costes, que en general no deberían afectar a la calidad del producto final, pero que como hemos ido viendo, en realidad si que ocurre, y puede que termine desfidelizando a los consumidores. Lo peor de todo, es la reducción en la partida de investigación.
Este recorte, hace que por ejemplo en la tecnología Tough Solar, el acumulador fuera un desarrollo de Panasonic, y que cuando hubo problemas, Casio decía que estaban defectuosos, y Panasonic que no estaban preparados para sus relojes. El uno por el otro, y la casa sin barrer. Mientras que Citizen en cambio, con su tecnología Eco-Drive, consiguió un mejor producto, que le ha permitido posicionarse como fabricante líder en cuanto a relojes analógicos solares. Un pastel, que ya le gustaría a Casio tener.
Del mismo modo, las maquinarias de muchos relojes de Casio, provienen de Citizen (Miyota) o de Seiko (SII), otro punto en el que ahorran costes de desarrollo, pero que a medio plazo, les pueda ocasionar graves problemas, incluyendo de rentabilidad. El máximo exponente, son los relojes tecnológicos con recepción por GPS, una tecnología que coloca a Casio en una posición destacada, si no fuera, porque en realidad esa tecnología está licenciada a Sony.
Vistas las cifras, se entiende porque ponen tan poco entusiasmo y esfuerzo en los relojes, es para ellos una categoría menor, que aunque relevante en la cuenta de resultados, no parece que sea estratégica. Opino que en la relojería, han optado por el camino rápido como TAG Heuer, pero mal hecho. Esta es la idea, sacan un reloj de plástico, al que llaman Gulfmaster GWG-1000 (o GWN-1000 y que para el caso es lo mismo), lo venden a 699€ (o 499€), y vendiendo uno solamente, consiguen un margen equivalente al de 100 o 200 relojes tipo F-91 o . Por supuesto, mientras les funcione, ¿quién no haría lo mismo? También podrían probar con modelos asequibles y poco vistos, como el F-84W, y subirle el precio de 20€, a 100€, con lo que ganarían mucho más. Claro que ya digo que lo ganarían, mientras la gente los comprase, y lo que concluyo, es que cuando proveedores como Sony decidan hacer sus propios relojes, otros como Citizen, les cierren el grifo debido a la competencia, se quedarán sin desarrollos propios.
estupendo articulo, guti, con muchos datos y muy bien explicado. Tambien muy acertada la conclusion: si casio invierte cada vez menos en innovacion, a corto plazo ganara mas pero a costa de hipotecar su futuro
Gracias bianamaran. Esperemos que me haya equivocado, o que reaccionen a tiempo. A ninguno de los dos nos gustaría que Casio desapareciese, o dejase de ser lo que era.