Llevo unos cuantos días que coincide en que me calzo unas Paredes Estrella y un Casio F-84W. Lo que empezó como una casualidad, es algo que he ido forzando.
Esos fines de semana en los que unas humildes, y aptas para todo zapatillas deportivas como las Paredes Estrella, o Ecology combinadas con un reloj digital de Casio Collection como un F-84W, un F-91W, un A-158W, un A-159W o hasta un CA-53W; te dan la impresión de ser la pareja perfecta.
Ambos son productos que me gustan, uno del calzado, y otro de la relojería. Pero además, es que son honestos. Objetos que no pretenden ser más de lo que son, no aspiran a aparentar. Que llevan mucho tiempo con nosotros sin apenas cambios, y que en cierta forma, nos hacen sentir igual ahora que hace 35 años.
No se trata solamente de rememorar aquellos tiempos pasados. Es mucho más que eso, porque cuando unos productos como estos, cambian tan poco con el transcurso del tiempo, nos damos cuenta de lo acertado que fue su diseño original. De cómo nos calzaban con comodidad, y nos daban la hora de forma práctica y sin complicaciones, antes, y ahora.
Como los Pepe Milán o el Kronos K-300, objetos que nos complementan y nos «visten», pero que además demuestran que no hace falta gastarse demasiado dinero por tener algo que vale la pena.
Un año, más o menos, me han durado unos tenis de marca.
Hace unos días noté como en los vestuarios del gimnasio me entraba agua en uno de mis pies. Extrañado por la humedad que sentía en la planta del pie, miré la suela y descubrí de inmediato un agujero, producto del desgaste.
¿Un año? Yo diría que bastante menos. En donde yo vivo – un lugar del norte de España – los inviernos son muy lluviosos, y durante semanas seguidas apenas ves un par de rayos de sol, y ni se te pasa por la cabeza calzarte unos tenis.
Muchas de las cosas que se hacían antes duraban mucho más que ahora. Hemos cambiado la medida de la rentabilidad: el largo plazo no interesa, sólo el corto.
Los venerables Casio que mencionas tampoco escapan a este mal. Bien podían estar hechos de acero: irrompible y, además, susceptible de ser pulido. En cambio, tenemos resina, esto es, un reloj con vocación de usar y tirar. Lo mismo que mis tenis.
Tienes mucha razón unrelojista, hoy en día es cada vez más difícil encontrar un producto hecho para durar. Si los hay, son en el sector del lujo. Nada que ver con lo que ocurría hace algunos años.
En lo de Casio tienes razón, ocurre exactamente lo mismo. No es ya que no haya cosas como el Casio W-780, con caja y armis de acero que se vendía a un precio razonable. Sino que además, en Collection, empieza ua hasta ser difícil encontrar cristales minerales en vez de resina.
Mítico F84. Ayer me fui a dar un paseito en la bici de montaña, y me puse mi F84. Mira que llevo reloj en el móvil y en cuentakilómetros pero para mi es ya como un fetiche.
Además me encanta la correa de este reloj, mucho mas fina que el del F 91 que es mas tosca. En su conjunto, tanto por la caja, por los colores y por la citada correa me parece un reloj precioso. Una pena que solo se venda en el mercado asiático…
Tienes toda la razón Alfonso. Estéticamente el F-84W es de los Casio más fieles a los de antaño. En realidad, porque sigue siendo casi igual que lo era en 1985. La correa más estilizada, la estética más sobria y madura… La pena es lo que dices, que haya que recurrir a eBay y sitios similares para hacerte con él. Bueno, y que haya perdido por el camino el cristal mineral en favor de uno de resina.
Esas Paredes Estrella son muy bonitas, mucho mejor que las Ecology.
El comentario de unrelojista me recuerda a algo… 😀
El F-84 te enamora a primera vista, sobre todo si te gustan los relojes old-school. Quizá la única sensación parecida que he sentido con otro sea el F-24… Otra rareza.
Nunca he llevado un F-24 bianamaran, por lo que no puedo compararlo, pero si que te doy la razón que las sensaciones old-school del F-84W son inigualables. Además, conseguible a buen precio, eso si, con bastante dificultad.
Sorprende que lo que más nos llene sea un reloj que tiene casi 35 años.