Llevo ya casi 5 años practicando el afeitado clásico. Una disciplina de la que os he ido haciendo seguimiento, pero de la que ya apenas hablo. El motivo no es que la haya abandonado, faltaría más, sino que he llegado a mi nivel de satisfacción. No es el afeitado perfecto, si ello existiera, pero si es suficiente para mi.
Empecé un poco como la mayoría, aprendiendo, descubriendo técnicas, y probando productos. A día de hoy, sigo con él, pero esa evolución se ha estancado. Es como si al haber encontrado aquello que me funciona, y con lo que me siento cómodo, haya sido suficiente. Me haya traído estabilidad. De hecho, aún conservo la mayoría de productos que compré para probar, y que voy gastando puntualmente.
Si bien pasé por una fase que yo denominé afeitado creativo, y del que os hablaré en un futuro, ahora he vuelto al afeitado convencional y tradicional, pero afeitándome solo una vez a la semana. Salvo excepciones, eso me permite llevar barba de varios días, y tener más tiempo para dedicar al hábito del afeitado clásico el fin de semana.
Si tengo tiempo, lo hago con brocha y jabón. Mi brocha favorita es la Vielong 13071, que es muy suave. Pero la Culmak, la Vielong 4402 y la Beter 20018 también me funcionan bien. La diferencia en la calidad y la cantidad de la espuma, no es tanta. Sólo las sensaciones más agradables, como si fuera un masaje.
El jabón que la acompaña es la crema de afeitar LEA Classic, muy agradable al olfato, y muy cómoda de aplicar. Si hablamos de barras de jabón, el de La Toja lo puede sustituir sin problemas. Solamente que igual que con la brocha, requiere un poco más de tiempo, y no es tan relajante.
Si no tengo tiempo, continúo fiel al aceite de afeitado de Floïd (o American Crew), muy práctico, e indispensable en viajes, pero que aporta menos sensaciones que la brocha y la crema. La emulsión Myrsol es más agradable que el aceite, pero ligeramente menos eficaz.
La maquinilla es la iKon OSS con cabezales Mühle de hace casi 3 años. La mejor inversión que he hecho, porque el mango es cómodo y de calidad, y los cabezales me dan la flexibilidad de escoger entre peine abierto y peine cerrado. Con mucha barba, el peine abierto es el ideal. Con poca barba, lo mejor el peine cerrado. En todo caso, ambos sirven, el abierto requiriendo más precisión y cuidado, y el segundo más pasadas.
No tengo problemas en usar otras maquinillas de afeitar cuando estoy de viaje, en ese caso, deben ser suaves como la Wilkinson Classic, o la Beter 02002. De vacaciones y cuando estás fuera, no siempre llevas los productos ideales, así que mejor necesitar algo más de tiempo al afeitarse, que terminar con la cara hecha un cromo. Definitivamente, nada de la Merkur 41N.
En cuanto a cuchillas de afeitar, me he decantado por las de filo medio/alto. Mis favoritas son las Astra verdes (Platinum), pero no encuentro demasiadas diferencias con las Astra azules (Stainless), las Gillette 7 O’Clock amarillas (SharpEdge), las Gillette 7 O’Clock verdes (Super Stainless), o las Tiger Superior Stainless. Las Astra me parece que son económicas, proporcionan una buena suavidad en el afeitado, y duran lo normal. Las poco afiladas nunca me funcionaron, pero lo que si es cierto es que las muy afiladas, que además suelen ser más caras como las Gillette Platinum que eran mis favoritas, o las Feather Hi-Stainless las encuentro que requieren demasiada atención.
En caso de cortes, algo que inevitablemente me ocurre el 5% de las veces, y que depende de la calma que tengas, de la barba, y del estado de la piel, suelo recurrir al Alumme di rocca. Myrsol Metisol me parece más cómodo de utilizar, pero ligeramente menos eficaz.
Después del afeitado, si la piel ha quedado castigada, o me apetece algo suave, recurro a una loción sin alcohol o bálsamo. El bálsamo LEA Classic es el más agradable sin duda, pero como es difícil de conseguir, suelo usar el de La Toja. Sin embargo las diferencias son mínimas, e incluso el de Nivea cumple.
Si quiero sentir la sensación refrescante del alcohol, mi favorito es Floïd mentolado y vigoroso, su olor, y lo refrescante del mentol son lo mejor. Algo subjetivo, puesto que lo mismo podríamos conseguir con Varón Dandy que es mi segunda opción. Como digo, a este respecto, igual vale Brummel o Williams Aquavelva.
En cuanto a perfume, me sigue gustando el Varon Dandy, y el Brummel. Lo clásico de entre lo clásico, si bien me han sorprendido las dos variantes de 9,60.
Por fin encontré mi jabón de tocador. Fue el Pardo de rosa con glicerina y me libré del Lida. En el baño, prefiero el jabón en pastilla también. Sobre todo el de glicerina Pardo. No es tan agradable como Moussel, pero si más natural y duradero. Mientras que en higiene dental, he descubierto también Kemphor Esencia 1918.
Dentro de todo lo que me funciona bien, escojo aquellos productos que gustándome, son más fáciles de conseguir, o más baratos. No me importa comprar Floid de 400ml y rellenar los frascos pequeños, o dosificar el Varón Dandy de 1l en un frasquito de plástico.
Ya veis que aunque las combinaciones son enormes, las diferencias entre ellos son muy sutiles. La clave es, como dicta la lógica, la maquinilla y la cuchilla. El resto, más bien cuestión de gustos.
Para mi , el aceite de afeitar floid fue un descubrimiento que casi me hace colgar la brocha para siempre, por las dificultades que tenia para desarrollar una buena espuma de afeitar. Creo que por la dureza del agua.
Y la sensación del post-afeitado con dicho aceite, en mi caso, es magnífica.
De los aftershaves me quedo sin dudarlo con las lociones antes que con los bálsamos. Y para la próxima loción que tenga que reponer, he decidido que iré por loción Tabac, a ver que tal.
Me ocurrió lo mismo Pepe. El aceite de afeitado Floid fue de los primeros productos que descubrí, y me quedé con él.
el aceite ese habrá que probarlo (cuando acabe todas las tontunas que tengo).
Echarte mentol por la cara tras el afeitado, Guti…, hay que tener valor 😀
Me resulta agradable ese refresco intenso que produce el mentol rebot. Supongo que otros preferirán algo más suave, como una loción. Para gustos los colores, o los productos. Lo que sorprende es que una disciplina minoritaria como el afeitado clásico nos ofrezca un abanico tan amplio de opciones. Me alegra que sea así.
Bueno del afeitado clasico yo me he quedado a medias, o sea a mi no me ha ido muy bien con las cuchillas clasicas. Si es verdad que siguiendo el foro afeitado me hice con las cosas necesaria gastando bastante dinero y luego vendi las cosas. Me he quedado con la brocha Omega que la uso muy poco. O sea uso geles de afeitar y maquinillas Gilette y a mi me va bien asi y muco mas comodo y rapido (3 veces por semana, mas no puedo se me irrita la piel). Lo que mas lamento es el Floid Masaje V y no me caso de decirlo.
Quedarse a medias está muy bien SoriN. No es un fracaso como parece que insinúas sino un autodescubrimiento. Cuando yo hablo de afeitado tradicional lo hago con la idea de luchar contra el marketing. Esas multinacionales que te dicen que 6 hojas y su espuma son lo mejor. Ocurre como con los relojes automáticos, que mucha gente desconoce que existan. Lo desconocen porque no son productos que se publiciten.
Lo que yo hago es decir que eso está ahí, que existe, y animo a que la gente lo pruebe. Si valoras la precisión, un reloj automático no es para ti, pero ya lo estás decidiendo con conocimiento de causa, no porque Festina te haga creer que sólo existen los cuarzos.
Tu has logrado usar brocha y jabón, de nuevo algo que no sale en la tele donde parece que sólo el gel de Gillette sea lo que se debe usar. Has dado un gran paso, y has encontrado tu forma. Una forma que no se publicita, y que encima te funciona mejor.