Días después de que acudiera al estreno de Top Gun: Maverick, la segunda entrega de la saga iniciada en 1986 por Top Gun, decidí revisionar la película original. La había visto en tres o cuatro ocasiones, y pese a las variadas críticas, tanto de la época como actuales, yo fui de aquellos a los que les gustó.
Top Gun (1986) es un filme con una trama un tanto ingenua, pero que destila gran parte de la esencia de los años 80 aderezadas con espectaculares escenas de vuelo y aterrizaje. Es verdad que la versión moderna de 2022 marca la diferencia cuando de lo que se trata es hacer real el pilotaje visto desde el interior, pero también que han transcurrido más de 35 años entre ellas, y la tecnología ha evolucionado muchísimo.
De todas formas, no quiero centrarme en el cine, si no más bien en la relojería, así que tras recomendaros que veáis ambas películas, comenzamos con lo que me ha llamado la atención.
La película parece rodeada de manera natural de todo aquello que conocíamos en 1986, y que más prestigioso y exótico nos parecía. Desde la motocicleta marca Kawasaki que conducía Tom Cruise (Pete Mitchell -Maverick-), hasta el elenco de gafas de sol estilo aviador que vemos de Ray-Ban, American Optical o Randolph USA.
En lo que respecta a los relojes, es una extensión de lo anterior, con aquellos modelos más en voga en la década de 1980. El Porsche Design Orfina Chronograph 7176S de Maverick, o el Rolex GMT Master Pepsi de Tom Kazanksky -Iceman- (Val Kilmer). Nada que ver con la versión actualizada, donde pese al guiño de mantener el Porsche Design en la muñeca del protagonista, todo se ha llenado de product placement procedente de IWC y su departamento de marketing con sus IWC «Strike Fighter Tactics Instructor» tanto en sus versiones Mark XVIII IW324705 como en los Chronograph IW389004, notorio en los planos tanto de los estudiantes como de los instructores.
La sorpresa es ver la cantidad de relojes digitales que aparecen en el película, y los pocos o ninguno de IWC. Verdaderamente pienso que es fiel a la realidad de la época, esos potentes y económicos relojes de cuarzo eran las piezas ideales para resistir el maltrato abordo de una aeronave.
Y es que aunque el material promocional explica que International Watch Company (IWC) incide en que siempre han apoyado a los chicos de Top Gun en Miramar (ahora en Fallon), la realidad nos dice que no fue hasta el 2007 en que lanzaron el primer reloj con la denominación «Top Gun». La primera y única marca comercial que ha tenido el privilegio de esa asociación desde que en 1969 se fundara la Fighter Weapons School.
Efectivamente en IWC Schaffhausen llevan décadas fabricando relojes específicos para el vuelo de enorme calidad. Sin embargo, sus precios siempre fueron muy elevados, no tanto como ahora, pero alejados de lo que podría permitirse un piloto, y lo más importante, sin ninguna ventaja práctica comparado con un Casio G-Shock, o como se puede ver en las imágenes, que casi cualquier reloj Casio o Timex digital de entrada. Cuando a partir de 2007 IWC empezó a entregar sus relojes a los alumnos y a instructores, la cosa cambió…
Si vas a someter a un cacharro a fuerzas G considerables lo lógico es que sea lo más ligero posible y que no tenga partes móviles.
Y en un reloj que no tenga partes móviles significa digital.
Haciendo el tonto en Twitter he realizado algún comentario con respecto a las diferencias entre la «original» y la «versión» actual.
Copio y pego para disfrute o no de los parroquianos.
Me da miedo volver a ver la original, por aquello del low-fi que se siente al ver una «cinta» de la década de los 80.
Pero además está que este tipo de pelis se ven mejor ahora que antes por las imágenes que se pueden conseguir y antes eran imposibles.
Cuando se estrenó nos flipó, pero no teníamos con qué comparar. Hoy en día vemos simulaciones que nos hacen sentir que son reales, ver escenas de combate aéreo de los 80 desluce un poco y nos defrauda.
Aunque es una comparación injusta, lo sé, pero el subconsciente es como es.
Efectivamente Fernando. Una cosa es la historia y la herencia donde no había otra cosa que el reloj mecánico, otra es el marketing en donde se invierten cantidades ingentes de dinero en posicionar este tipo de relojes, y la otra es su idoneidad. Con un reloj digital de resina y menos de 100€ tienes lo suficiente para volar, y en caso de daños, pues son 100€, no 7.000€.
Hace unas semanas hice una «suelta» en avioneta. El instructor llevaba una gorra de Breitling, los relojes de vuelo por antonomasia. Sin embargo, y pese a toda la publicidad, en su muñeca llevaba un Garmin. Era más barato, además era la empresa que tradicionalmente hacía las aviónicas de las aeronaves, y encima ese reloj en concreto estaba dotado de funciones especiales para volar.
Esa es la prueba de como la mercadotecnia busca una cosa, pero los expertos realmente compran otra (otro tema es cuando se los regalan).
Sobre la peli original tiene su encanto volverla a ver Fernando. Es verdad que la intro en el portaaviones que recordaba espectacular, sigue estando muy lograda, pero comparada con la nueva versión, no tiene nada que ver. Las cámaras de ahora tampoco tienen nada que ver con las de hace 40 años. Sin embargo, si que hay muchos elementos que se mantienen en común, y no sólo me refiero al Porsche Design o a la Kawasaki que menciono, también algunas escenas de la trama.
No tengo ni idea pero doy por hecho que los pilotos de combate contarán en la cabina del avión con la hora bien visible en un lugar intuitivo y en formato digital. En la muñeca tendría más sentido que llevaran un diver con índices y agujas con Tritio -por si son derribados y caen al mar en la más completa oscuridad-, o igualmente un digital específico para estas situaciones.
La secuela de Top Gun todavía la he visto y soy muy escéptico al respecto, ya que la original no la considero una película de acción al uso, Tony Scott imprimía en aquella época un estilo muy particular a sus filmes: las escenas, las poses, la miradas, toda la parte estética está calculadamente estudiada para transmitir seducción en cada secuencia, tal como en un anuncio de perfumes, sólo que aquí se mostraban gafas, motos y cazadoras.
También eran brutales las bandas sonoras, acopladas con tanta exquisitez a las imagenes que dejaban todo lo demás -guión e interpretaciones-, en un segundo plano, aquella escena de cama con Deneuve y Sarandon en «El Ansia» -con aquellas palomas volando en cámara lenta-, o ese inicio de Beverly Hills Cop 2, donde el director rueda el atraco de Brigitte Nielsen con tanta clase que parece más una escena erótica que un robo. Le criticaban de hecho estas cosas pero a mí me encanta, lo malo es lo que sucede hoy día, donde los efectos especiales acaparan toda la película y acaban mareando y aburriendo al espectador.
Empiezo por el final Jostma. El estilo de Tony Scott siempre me gustó, se nota que venía de la publicidad, dando énfasis a la parte estética que a la trama, y creaba unas atmósferas increíbles. La nueva no te va a decepcionar, creo que pierde parte del romanticismo de la vieja, pero también corrige un poco el exceso de ingenuidad y las tomas son mucho más reales.
La mayoría de pilotos que conozco no usan reloj, es algo que no necesitas. Tanto si navegas en vuelo visual como en instrumental, la aviónica te da toda la información que necesitas. No requieres de un reloj para sincronizar una maniobra, por poner un ejemplo.
El mundo del piloto de combate lo desconozco, pero está claro que si hace falta coordinación entre el escuadrón, eso no puede depender de la aproximación que ofrece un reloj analógico.
Ya veo, me parece que tiene todo el sentido. La peli la veré seguro, pero no me puedo permitir frecuentar las salas todo lo que quisiera y cuando lo hago priorizo siempre el género de Terror. Por cierto, he encontrado en Youtube la breve intro que comentaba, merece la pena darse el gustazo y hay sorpresa horológica en el minuto «2:25».
https://www.youtube.com/watch?v=w9d1Kq77B2Q&list=PLpDkQf6qSP0MwFItyDWRR-JoQWHLmOkqZ&index=1
Jostma es curioso que aunque he visto «Superdetective en Hollywood 2» (Beverly Hills Cop 2) varias veces, la primer en el cine, pero también en VHS, televisión y torrent, obviamente no recordaba ese Heuer. Una estupenda elección para 1987, que irónicamente ya operaba como TAG Heuer, así que debe ser un cronógrafo anterior de 1985.
Me quedo con el fragmento hasta el primer minuto, unas tomas sencillas pero magistralmente desarrolladas que con la música ambiente tan ochentera son puro Tony Scott. Increíble como sale del coche Brigitte Nielsen.
PD. Muy agradecido porque hayas compartido ese fragmento con nosotros, un disfrute.
Buenas tardes amigos.
Cada cosa tiene su tiempo amigos. Me es difícil ver películas con cierta solera actualmente; porque, visualmente no me atraen. Eso me pasa con todas las películas de Indiana Jones (quitando de la última cruzada).
Sobre el reloj, supongo que llevaban el reloj porque tiene su relación con el mundo militar no porque lo fuera usar. Así como los pilotos de caza llevan visera antireflejos y las gafas carecen de sentido; lo mismo sucede con las chaquetas de piel.
Que pasen una buena tarde.
Muy buena la comparación con las chaquetas de piel y las gafas de sol Sergi. Ciertamente pueden ser útiles fuera del aparato, pero dentro de él, su utilidad es nula, lo mismo que el reloj.
Lo de ver películas antiguas o viejas es un proceso mental. Una vez consigues aislarte de las diferencias técnicas, al final te centras en cosas como los escenarios o los actores, y se pueden disfrutar igual.
Muy buenas tardes a todos y un saludo cordial. Acabo de descubrir este espacio y quiero felicitar a su autor ya todos los que ayudan con sus aporte. Desde hoy en mis favoritos.
Muchas gracias Julio Salvador Belda Vaguer, y bienvenido. Me alegra que hayas terminado aquí.
Un saludo.