Ya os explicaba en Compras Españolas que Yumas fue una de mis marcas favoritas durante la infancia y la juventud. La marca, ahora denominada Yumas Footwear, siempre se ha caracterizado por sus zapatillas deportivas bonitas y asequibles. No en vano, en la época de máximo esplendor, a principios de la década de 1980, llegaban a vender más de 5 millones de pares al año.
Con la amenaza de las multinacionales, decidieron hacer lo mismo que ellas, fabricar en países asiáticos con mano de obra barata, a la vez que potenciaban sus diseños. Aunque éticamente discutible, a nivel de negocio tenía sentido, podían vender una calidad similar a sus competidores, que probablemente fabricaban en la misma fábrica que ellos, pero a precios mucho más baratos, al tener menos margen, y menos gasto en publicidad.
Sin embargo en los últimos años, has comenzado a invertir más en publicidad (ver Melendi) y se han ido posicionando como un calzado de moda. Si leemos cualquiera de los testimonios en el blog de Yumas, tenemos el caso de Gold Sneakers de Y las bailarinas en el bolso (Bea Pla), que nos habla de lo bien que le quedan sus Yumas, cómo conjuntan con otras prendas de otras marcas, y que casualmente en 2014 llevaba unas Nike y en 2015 unas XTI, así que mucho, mucho, no es que sienta las marcas de aquí. Lo mismo podríamos decir de Definitely Fashion (Marta Bespi), Shoes and basics (Patti SantamaríaCon paso chic (Clara Fernández de Molina Fragero), Teresa Quiroga, Trendy in love (Tania Agulló), Alas de Ángel (María del Mar Álvarez), El mosquito glamuroso (Laura Molina Ayuso), Twins for fashion (Julia y Amalia), Essential Nice (Isabel Alvarez García), Corazón de Maniquí (Nerea) o Stephanie Belles. Los nombres ya nos dicen mucho, artículos en donde se ven más fotografías de conjuntos de moda que textos, y donde en el mejor de los casos, se ignoran totalmente las características esenciales del producto. Exceptuando la moda y la tendencia, no nos dicen si ofrecen buena amortiguación, si son calurosas, si tienen buena transpiración, si la plantilla es de calidad, o si la suela ofrece un buen agarre. Supongo que no es algo que a sus lectores les preocupe demasiado, ni tampoco a Yumas.
Un cambio en la estrategia de la marca, que les ha permitido subir tarifas, a cambio de renunciar a sus valores originales. Las Melba Oro tienen un precio recomendado de 42€, ya veis que no es precisamente económico para unas zapatillas Made in China. Así que han acabado convirtiéndose en otros Joma, Mustang, John Smith o Kelme. Marcas deportivas que pese a ser originarias de nuestro país, han terminado copiando a Nike y Adidas, con inversiones en publicidad, patrocinios y marketing que probablemente superen la de otros aspectos más importantes en una zapatilla. Tristemente, este cambio de rumbo parece coincidir con el reciente fallecimiento del fundador de Yumas, Andrés Navarro Soler.
Hace algo de más de dos años, os hablaba orgulloso de mis Yumas Maverick, unas zapatillas preciosas, con un precio asequible, y que sin ser un alarde de calidad, me han resultado igual de buenas y duraderas que unas Reebok por poner un ejemplo. La nueva Yumas no es para mi, porque creo que no aporta ningún valor diseñar una zapatilla, ponerle tu logotipo, y venderla 10 veces más cara de lo que te costó producirla.
La excepción son las New Galaxia, New Nilo y New Mónaco, unas deportivas que aparecieron en el mercado en 1978, y que al menos estéticamente, respetan a las originales. De hecho las Yumas Malta que protagonizan este artículo, son una reinterpretación de éstas, lanzadas en 2014.
Lo primero que vemos, es la bonita caja de presentación azul de Yumas. De buena calidad, y que me recuerda mucho a la de Adidas.
Al abrirlas, nos encontramos ante una etiqueta Yumas Piel, no quiere decir que sea completamente de piel, puesto que es microfibra, sino que tiene algunas partes en piel natural, como los refuerzos.
La etiqueta de la empresa, Exclusivas Yumas, no nos indica donde están fabricadas, pero con la leyenda de Importador Exclusivas Yumas S.L., ya nos podemos temer lo peor. No están hechas aquí.
Que el modelo se denomine denim, puede resultar engañoso. Se debe solamente a que su color azul, similar al de los pantalones vaqueros, no a que utilice ese tipo de tejido.
La estética, es la clásica y reconocible de las Yumas de antaño. A algunos les gustará, y a otros no, pero no podemos negar, que es un diseño bastante diferente a lo que estamos acostumbrados a ver. La suela de un color naranja oscuro y con tacos, es también muy vistosa, y más práctica de lo que podría parecer. Los tacos agarran bastante bien, y no resultan incómodos a la hora de caminar. Como se puede apreciar, se extiende por parte de la zona trasera de la zapatilla, otro toque diferencial más, del que me preocupa un poco que pueda acabarse despegando, lo que ya se conoce como Efecto New Balance.
Los cordones son demasiado largos para esta zapatilla, mejor demasiado largos que demasiado cortos, pero siempre quedarán unas lazadas enormes, aunque les hagamos un doble nudo. El material sintético del exterior, no es muy grueso, así que el pie respira bastante bien.
El interior es bastante sencillo, y la plantilla de una calidad aparente aceptable. Los acabados me parecen buenos, y los materiales normales.
Lo mejor es como quedan puestas, transportándonos de inmediato a los años 80, con su diseño tan propio, sus colores azules, los refuerzos en piel, y los cordones blancos, es como si camináramos por otra época.
En la tienda oficial las venden a 44,95€, ahora rebajadas a 39€, que sigue siendo un precio muy alto para lo que ofrecen. Yo las he podido conseguir a menos de 30€, no es la oferta del siglo, pero al menos es razonable para un capricho como éste. Nada que ver con las Segarra Modelo 810, mucho más baratas, con mejores materiales, y fabricadas aquí.
Actualizado a domingo 28 de enero de 2018. 19:43:
A los pocos días de uso empecé a darme cuenta que en las zonas donde la zapatilla se arruga debido a la flexión, el material empezaba a cuartearse. Digo el material, porque visto este defecto, empiezo a dudar que se trate de piel. El efecto es como si el tejido/piel fuera demasiado duro y con el movimiento al caminar causara que la pintura azul se fuera descascarillando.
Por de pronto no puedo afirmar si es solamente un daño cosmético o por el contrario algo estructural y que acabe afectando a la duración de las Malta. En todo caso, una mala sensación como la que vimos con las Victoria Basket.
Actualizado a viernes 6 de abril de 2018. 16:16:
Tras unas 12 puestas puedo confirmar que el daño es estructural. No es solamente el recubrimiento que con la flexión se caiga, sino que ello afecta también al material de su interior. Esta fotografía lo muestra, unas Yumas Malta casi nuevas, que están como si tuvieran kilómetros y kilómetros de recorrido. Desgraciadamente, nada que ver con el admirable envejecimiento de unas J’hayber Olimpo.
La estética retro es preciosa, lástima que no estén a la altura del modelo original. En Yumas deberían hacer como en Paredes, que aún fabrican sus Estrella como antes, o como Jhayber con sus Olympo. Si en Yumas quisieran tendrían un modelo superventas.
Las Galaxia me encantan, por cierto, pero claro, por ese precio uno esperaría una calidad algo mayor, no digo hecho en España (que bien podría), sino unas zapatillas más robustas y duraderas.
Yumas tienes unos precios que son bastante competitivos, al menos en ofertas y rebajas, otra cosa son las tarifas normales de la web. El problema es que como ya hemos comentado unas cuantas veces, su calidad es muy dispar. Hay modelos que salen muy buenos como mis Yumas Maverick, otros que salen muy malos como tus Yumas Lander, y otros que salen normalitos como tus Yumas Arizona o estas Yumas Malta.
Que no sean demasiado duraderas, cuando son baratas, es algo que no me gusta, pero que podría aceptar. Sin embargo con el precio «de catálogo» de las Malta, uno espera buenas zapatillas, y como tu dices, incluso hechas en España.
Personalmente Yumas tiene mucho encanto para mi. Siempre fue de mis marcas favoritas. Pero se está quedando atrás, porque está abandonando los valores que tenía. Calidad y diseño a buen precio. Y en eso, te doy la razón, unas Paredes Estrella, son más baratas, mucho mejores, y quizás el diseño no sea tan chulo, pero es igual o más legendario que el de las Yumas Galaxia o Malta.
Eso no parece piel, parece un plástico sintético… Que pena de zapatillas, porque venden estética del pasado, pero obviamente cualquier parecido a su pasado es mera coincidencia. Las Jhayber como mencionas, y también las Paredes, con toda la caña que han llevado este invierno (incluso entre nieve) ahí están, y ni un corte en el forro. Eso sí, desteñidas y una vez casi me mato con ellas (al no tener apenas tacos, en la nieve son un auténtico peligro mortal).
«plástico» y «sintético» es reiterativo, pero bueno, todos me entendéis 😀 En todo caso o parece plástico, o piel sintética. Que sea auténtica piel es bastante raro. Aunque igual es piel de pollo… 😛
En mi opinión ese tipo de fallos son los que pueden acabar con una marca. Y aunque me duela verlo, Yumas va por ese camino. Sus productos ya no son baratos como lo eran antaño, y si sumamos que la calidad y la durabilidad deja mucho que desear, por más que gasten dinero en influencers, el boca a boca va corriendo, y Yumas acaba teniendo fama de marca mala. Justo lo contrario de lo que pretenden.
En varias ocasiones he solicitado su colaboración, incluyendo en este caso para que dieran alguna explicación al respecto. Como respuesta he obtenido silencio, lo que representa una prueba que no quieren rectificar, y que son plenamente conscientes de estos problemas. Prefieren ocultarlo y que nadie se entere, así que ahí va mi aporte para quien esté interesado, y lo conozca.
Por suerte en calzado tenemos muchísimas marcas en España, como bien citas, Paredes o J’hayber son una buena opción, así que nada de Yumas, porque visto lo visto, es tirar el dinero.
Vengo aquí desde la entrada de las New Balance con fecha más o menos de este comentario. Aprovecho para añadir.
Yumas sigue igual. Ya comenté varias veces que a mediados de junio me animé a probar unas Aaron. Compradas en zapatería, tampoco baratas para ser producidas en China, unos 37 euros si no recuerdo mal.
Tras uso casi diario, pero sin castigo alguno, solo tenerlas puestas, ya que ni siquiera es la época en la que camino más, dos meses casi y medio duraron. A ni al mes, ya se les despegó a ambas porque sí una esquina del remate de la puntera de la misma suela. A los casi dos meses, en una ya se marcaba la parte más tanspirable en el empeine y por donde doble como a tus Denim, Guti. Pero a ni a los dos meses y medio, ya empezó a despegarse la suela por la parte delantera. Y por lo que llegaba a ver hacia dentro, no reparable (un zapatero me lo enseñó).
Las plantillas que me resultaron muy cómodas, aún nuevas, por lo menos se pueden sacar y las aprovecharé en algún otro par de zapatillas futuro.
Pero no creo que repita con Yumas (como con tantos con similar resultado). ¿Sólo dos meses un calzado deportivo y sin recibir trote para eso? ¿Estamos locos? Y por más de 30 euros… vamos, que no. Que merece la pena meter 20-30 euros más según el PVP, y comprar las J’hayber Aventura Olimpo o Nuevo Olimpo de todas a todas, que ahí están aún con sus cuatro achaques casi invisibles de mis Aventura Olimpo con 6 años ya, pero aún aprovechables.
Cada vez da más miedo probar otras cosas, y hasta con marcas de aquí como Yumas, por 30 euros o más. Dejan la sensación de ser dinero tirado a la basura. Y no poco precisamente, máxime con la tónica de lo que deben ser sueldos los sueldos medios reales según la industria «y el mercado».
Siempre es algo doloroso admitir que una empresa española no está a la altura Alejandro, y ya somos muchos los que coincidimos en Yumas. No dejan de ser diseños bonitos sí, pero con una calidad china del calzado de 10€ o 15€, pero pidiendo por él 30€. Efectivamente sale a cuenta comprar unas J’hayber. Si las Yumas apenas te duraron 2 meses, la diferencia de precio con las J’hayber se amortiza rápidamente.
Por cierto que justo escribía esta respuesta mientras miraba su web, y me alegra que por fin hayan sacado unas Olimpo para ellas, las Venus. Al final son las féminas las que tiran de tendencia, así que en gran parte de sus pies depende que den el salto a la fama, algo que aún no han conseguido, aunque es verdad que cada vez se ven más pies con ellas.